Primer año de gestión del gobierno del presidente Luis Arce Catacora, del Movimiento Al Socialismo (MAS), un mandatario — define un legislador masista— más bien “técnico”, con todo lo que eso, bueno o malo, pueda traer; eso sí, “animal político” como Evo Morales no es, añade el irreverente diputado. Como pasa con todo Jefe de Estado, su gestión inevitablemente está marcada con su sello personal; pues bien, esto parece ser que lo mismo como ministro que como Presidente, Arce no deja de ser un ‘homo economicus’.

Aunque, naturalmente, la oposición también tiene lo suyo de crítico al presidente Luis Arce, con aseveraciones desde que el Presidente real no es él, sino Evo Morales, o que, preso de un ala radical del MAS, es más centralista que el propio Evo Morales.

Para el diputado cruceño del MAS Jerjes Mercado, por ejemplo, el Presidente tuvo una muy buena gestión porque, además de controlar relativamente la pandemia, sobre todo ha “reencauzado la economía, hay buenas señales ya de crecimiento económico y siempre con redistribución de la riqueza”; a esto hay que añadir, asegura el legislador, que “a pesar de intentos de desestabilización, se ha logrado la pacificación del país”.

TRABAJO. Y es que hay que poner en contexto lo hecho, reclama Mercado: “Comparando cómo estaba el país, considero que el presidente Arce ha hecho un gran trabajo en este corto tiempo; insuficiente todavía, por supuesto, porque no se pueden resolver todos los problemas que tenía el país, y que se profundizaron con la pandemia, más el mal gobierno de Áñez, no puede ser resuelto en un solo año”.

El diputado incluso se arriesga a afirmar que será con Arce al frente que en los próximos cuatro años se lograrán resolver “problemas estructurales” que arrastra el país: “No me cabe duda que en los siguientes cuatro años, no solo que se van a resolver los problemas de los últimos tiempos, se van a resolver los problemas estructurales del país”.

Si alguna definición tendría que hacer del mandatario, Mercado arriesga: “Es un gran técnico y una persona muy tranquila. Lo más relevante de él es su experiencia y los logros económicos, reconocidos internacionalmente. Es de mucha predisposición al diálogo, pero también con una firmeza de no dejarse chantajear”.

En cuanto a la acusación que viene desde la oposición, de que en realidad el que está gobernando no es Arce, sino Evo Morales, Mercado cuestiona:

“En la gestión pública eso no creo que sea cierto; en la gestión del partido, del MAS-IPSP, tiene que participar Evo Morales, porque es el presidente del partido; por lo tanto, es natural que él se mueva en ese ámbito”.

Comparando los estilos de gestión del presidente Arce y del expresidente Morales, tomando en cuenta que se trata de un mismo partido en el poder, el diputado cruceño destaca que el animal político aquí es Evo Morales:

“Evo Morales, guste o no guste, ha sido y es un animal político, hay que reconocer eso, para bien o para mal. (En cambio) Lucho Arce es un presidente mucho más técnico, algo más parco, y no es, por supuesto, el animal político que es Evo Morales”.

Ahora, en vista a mejorar su gobierno, señala el diputado Mercado, hay algunos problemas que de manera urgente Arce tiene que rectificar: “Tiene que fortalecer el aparato, su gabinete político; lo mismo, fortalecer la parte comunicacional; hay que terminar de derrotar a la pandemia; tenemos que alcanzar un crecimiento sustentable de más de 5 por ciento; y, desactivar los focos de conflictividad que puedan existir”.

FRACASO. En contrario, para la oposición la gestión de Arce directamente es un fracaso, y empezando por la especialidad del Presidente, la economía.

“Para mí, es un fracaso la gestión en el tema de la reactivación económica y la salud”, destaca de entrada el diputado de Comunidad Ciudadana (CC) Marcelo Pedrazas.

Si hay un sello del presidente Arce y de su gobierno, afirma el legislador opositor, es la debilidad: “Un gobierno, además, débil, improvisado para administrar la crisis que él mismo genera con normas que son inconstitucionales, y con actitudes de división en varias áreas de la composición social en el país”.

Y, sí Pedrazas ratifica la “presencia” de Evo Morales en la gestión misma. “Una gestión en la cual ha cohabitado Evo Morales con Luis Arce; de modo que quien ha terminado ejerciendo el poder ha sido Evo Morales”.

Aquí, el legislador de CC arriesga la afirmación de que es esa presencia subterránea de Morales la que está generando un creciente clima de inestabilidad: “Una cosa es ostentar el cargo, y otra, ejercerlo; y él (Luis Arce) ha dejado que ejerza Evo Morales, y producto de eso es que estamos viviendo momentos que están empezando a ser similares a los de 2019”.

El diputado Pedrazas descree de la reactivación económica que, según el Gobierno, ya vive el país. “Hay una reactivación económica que ha quedado pendiente; hay un proyecto de Ley de desarrollo económico que ha presentado (la Ley 342 Plan de Desarrollo Económico y Social 2021- 2025) que es copia de lo que se hizo en 2016, y hemos visto que no es un modelo que ha dado resultados; tenemos empresas (estatales) deficitarias”. Además de que tampoco hay exploración y explotación hidrocarburífera, remarca el legislador, “no hay una reactivación económica real, es más el maquillaje de los números; por eso decía que es un fracaso”.

Aquí es necesario recordar lo que el presidente Arce anunció el 23 de octubre en su cuenta de Twitter: “Con el 9,4% de crecimiento al primer semestre, Bolivia ocupa el tercer lugar en crecimiento económico de Sudamérica. Retomamos nuestro modelo económico social, comunitario y productivo, reactivamos la economía y sacamos adelante la salud y la educación”. Y es que al primer semestre de este año, el Producto Interno Bruto (PIB) de Bolivia se expandió 9,36% con relación al similar periodo de 2020, apunta la sección económica de LA RAZÓN.

En lo relativo a la agenda inmediata que de todos modos la oposición le exigiría al gobierno del MAS, Pedrazas directamente apunta a la justicia:

“Inmediatamente (lo que hay que hacer), es el cambio de los operadores de justicia, porque siguen en la construcción y la narrativa de golpe de Estado, y mientras no tengamos una justicia independiente e imparcial, muy poco vamos a lograr nosotros una verdadera reconciliación entre los bolivianos”, priorizó el diputado.

RADICAL. Más radical aún es la crítica al presidente Arce desde lo que se puede llamar el “punto de vista oficial cruceño”, Creemos en la Gobernación.

En una oportuna entrevista en la capital oriental, realizada en el programa por streaming de LA RAZÓN Piedra, papel y tinta hace unos días, los asambleístas departamentales por Creemos Óscar Feeney (vicepresidente de ese Legislativo) y Paola Aguirre (secretaria general) no dudaron en aseverar que Arce está mostrando una actitud más centralista incluso que los gobiernos de Evo Morales.

“El problema central, que ha derivado en una serie de conflictos, está en la vocación autoritaria que tiene el Movimiento Al Socialismo para concentrar en sus manos todas las fuerzas del Estado”, fue la primera definición que hizo Aguirre del conflicto de tierras en el departamento de Santa Cruz.

Analizando el reciente incidente de retención por parte de “avasalladores” de tierras en Las Londras de periodistas y otras personas, el asambleísta Feeney apuntó que este tipo de acciones son frecuentes en Santa Cruz, solo que no se los publicita. Y son frecuentes, dice, por “incumplimiento de deberes” del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), por la dilación de los trámites en que incurriría.

A la fecha, los hechos de Las Londras están siendo investigados por la Fiscalía departamental cruceña.

Para Aguirre, el avasallamiento de tierras “es una medida geopolítica de concentración de poder por parte del MAS”, que la llevó adelante Evo Morales, pero que ahora “operada con un ala radical, Luis Arce está profundizando”. Una acción geopolítica porque sería el modo que tiene el MAS de “expandirse territorialmente”.

Peor aún, afirma Aguirre: hay un “propósito deliberado de atacar el modelo productivo cruceño”, a través de establecer el escenario “empresarios agrícolas opresores frente a campesinos interculturales víctimas”. Estos últimos, remarca la asambleísta, son “manipulados por el MAS, instrumentalizados, como el MAS instrumentaliza a las masas”.

Con gente trasladada de un lugar a otro con la promesa de darles tierra, se trata no solo de un avasallamiento de tierras, sino de un “avasallamiento cultural”, apunta Aguirre.

Para la asambleísta, esto está llevando a que se creen ciudadanías de primera y de segunda, donde los ciudadanos de primera, los privilegiados, serían los del MAS.

Ante el problema de que esto se convierta en una espiral de violencia, y si no hay una salida, cuestión planteada por la conductora del programa, la directora de LA RAZÓN, Claudia Benavente, los asambleístas desconfían de la buena fe del gobierno de Arce.

Para Aguirre, incluso la investigación de los hechos de Las Londras carece de credibilidad: “es como poner al ratón a cuidar el queso, es imposible que el MAS se investigue a sí mismo”; a tal punto está convencida de esto la autoridad departamental, que afirma que los encapuchados que amenazaron a los periodistas en Las Londras son “afines al MAS”.

Incluso la sola despolarización en el tema parece no tener perspectiva, inquirió la conductora Benavente.

“La verdad es que no veo un futuro esperanzador; creo que lamentablemente la élite política del MAS es una élite bastante radical; he podido notar que esta gestión de Luis Arce está siendo mucho más atropelladora de la autonomía que el propio Evo Morales, porque está sacando leyes absolutamente centralistas”, ilustró Aguirre la tensión existente entre las autoridades departamentales y el Gobierno central.