Medio: Página Siete
Fecha de la publicación: domingo 07 de noviembre de 2021
Categoría: Organizaciones Políticas
Subcategoría: Democracia interna y divergencias
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La diputada disidente de Comunidad Ciudadana (CC) Keyla Ortiz Dorado (Beni) negó este domingo que su autopostulación a un cargo en la directiva -inconsulta con su bancada y apoyada por el Movimiento Al Socialismo (MAS) - tenga que ver con el partido oficialista. A la vez, es estrelló contra su partido, al que acusó de prácticas antidemocráticas y de no haberla tomado en cuenta para ocupar cargos en la directiva de la Cámara de Diputados.
“ Los medios de comunicación tiene que saber. No estoy con el MAS, no tiene nada que ver con esto. La culpa es de ustedes (apuntando a sus colegas de CC) porque nunca hubo consenso ni democracia entre ustedes. Mi persona no firmó esa plancha que ellos (bancada de oposición) presentaron porque me sacaron para que no vote (…) ”, sostuvo alentada por aplausos de los legisladores de la bancada del MAS.
La Cámara de Diputados vivió ayer una bochornosa pelea durante la sesión para elección de la directiva, que entró en cuarto intermedio hasta la mañana de este domingo, cuando sorpresivamente fue reinstalada por el oficialismo en las viejas instalaciones del Palacio Legislativo.
Tres diputados disidentes, dos de CC (entre ellos Ortiz Dorado) y uno de Creemos conformaron un bloque minoritario para presentar sus propias planchas, respaldadas por el MAS, en desacuerdo con sus bancadas.
Los disidentes son Edwin Rosas de CC- Tarija y Keyla Ortiz del Beni de CC-Beni, quienes se autopostularon a la segunda vicepresidencia y la tercera secretaría, respectivamente. La bancada de CC, en coordinación con la de Creemos, ya habían postulado a Enrique Urquidi y Walter Villagra para esos cargos.
La tercera disidente es Sandra Paz de Creemos, quien el año pasado –en una movida similar– se alejó de su bancada para ocupar la cuarta secretaría con los votos el MAS. Este año se autopostuló para mantenerse en el mismo puesto.
La oposición denuncia un "golpe legislativo” que el partido oficialista pretende afincar por medio de la captación de legisladores disidentes a cambio de “prebendas y cargos”.