Medio: El Deber
Fecha de la publicación: miércoles 03 de noviembre de 2021
Categoría: Órganos del poder público
Subcategoría: Asamblea Legislativa Plurinacional
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La Asamblea
Legislativa cerró el primer año de gestión constitucional que desde 2020 lidera
el presidente Luis Arce. La última sesión de la legislatura estuvo marcada por
tensiones entre el MAS y los opositores por la crisis política de 2019, y la
ausencia del vicepresidente David Choquehuanca, quien es el presidente nato de
ese poder del Estado.
Precisamente, por la
mañana se divulgó el programa de la clausura de la legislatura 2020-2021 en el
que estaba contemplada la participación de Choquehuanca con el mensaje de
clausura. Pero, ante la ausencia de este, el presidente del Senado,
Andrónico Rodríguez, cerró la legislatura tras dirigir una polémica sesión.
El primer momento de
tensión se produjo cuando el ratificado presidente de la Cámara de Diputados,
Freddy Mamani, insistió en llamar “de facto” al gobierno transitorio de Jeanine
Áñez en el momento en el que entregaba su informe de gestión al pleno
del Legislativo.
Ante este balance,
opositores y legisladores del gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS)
gritaron “fraude” y “golpe”, respectivamente, hasta que Rodríguez hizo
varios llamados en favor de “la cordura”.
Superado ese
incidente, la diputada Miriam Martínez (MAS) arrebató un letrero que su
colega María René Álvarez, de la alianza opositora Creemos, exhibía
durante la presentación del informe de las principales autoridades del
Legislativo.
El cartel del la
legisladora alertaba: “Gobierno oculta la realidad de las milicias
armadas a nuestro país, y para eso el MAS están dispuesto a utilizar la
fuerza. Hoy fue prueba clara del abuso y discriminación de que son capaces”.
La opositora
denunció la vulneración de sus derechos ciudadanos porque el MAS no le
dejó expresase.
Informe
En el informe,
Mamani señaló que se aprobaron 50 proyectos de ley y destacó las normativas en
favor de la reactivación económica como el Impuesto a las Grandes Fortunas, la
devolución del 5 % del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y la devolución de
aportes de las AFP.
Rodríguez, en el
informe, reconoció que hace falta superar muchas diferencias y calificó la
gestión de “regular”, precisamente por las tensiones.
“Estamos en un
escenario de mayor expresión política, de debate con altura, con respeto, demostremos
al pueblo boliviano que esta gestión legislativa muestra señales positivas de
la construcción de la patria que todos queremos”, señaló.
Los momentos de
mayor tensión se vivieron en julio cuando el senador Henry Montero
(Creemos) y el diputado Antonio Colque (MAS) se agarraron a golpes
durante la interpelación al ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo.
El otro momento de
tensión se produjo el 6 de agosto cuando el presidente Luis Arce entregó
su mensaje en ocasión del aniversario patrio. Tanto oficialistas como
opositores portaron letreros sobre el “golpe” y “fraude” cuando
el presidente acusó a Áñez de liderar un gobierno “de facto”.