El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, denunció este lunes un intento de magnicidio en contra de Luis Arce en 2020 tras las elecciones de hace un año. Acusó principalmente al exministro de Defensa Fernando López, quien, según dijo, habría conversado con sicarios vinculados al ataque contra el presidente haitiano Jovenel Moise.

En conferencia de prensa, el Ministro difundió un audio entre López y un hombre identificado como J.E.P., quien fue apresado en noviembre de 2018 por una serie de delitos y al encontrarse los audios, fue trasladado a Chonchoroco. Además es acusado de realizar los contactos con empresas extranjeras “para traer sicarios y paramilitares” a Bolivia.  

En la llamada también se escucha a un “traductor”, Luis Suarez –conocido como “ciberrambo”–, un exsargento estadounidense conocido por crear una serie de algoritmos en la crisis política en 2019.   

“En este audio se puede escuchar la intención del señor López por desconocer la voluntad del pueblo en las urnas del año 2020 con la victoria de Luis Arce Catacora, que ya lo hicieron con Evo Morales, contratando mediante empresas de sicarios a paramilitares para realizar acciones violentas en nuestro país”, indicó.

Agregó que se encontraron correos electrónicos entre López y J.E.P. en los que cruzan información respecto a las hojas de vida de las posibles contrataciones de “sicarios que querían atentar contra la vida de nuestro presidente pasado el 18 de octubre de la gestión anterior”. En uno de los supuestos contratos figura un contrato de $us 125 mil por año.

Acusó al exministro de Defensa de buscar “quedarse con el poder matando a bolivianos y a bolivianas contratando extranjeros”.

Además lo vinculó con el magnicidio en Haití en junio de este año, ejecutado por colombiano. Tras la captura de 21 personas involucradas, dijo que se identificó a Germán Alejandro Rivera García, excapitán el ejército colombiano, mismo que habría llegado al país el 16 de octubre de 2020, junto con otras cuatro personas. Según Del Castillo, cuando estaban en campaña electoral, los servicios de inteligencia del MAS ya sabían de la presencia de estas personas en el país.

“Lograron identificar que se estaba gestando un plan desestabilizador con el objetivo de no permitir que nuestro hermano presidente Luis Arce Catacora asuma el poder en caso de ganar las elecciones”, afirmó al señalar que estas personas salieron de Bolivia dos días después de las elecciones.     

“Queda claro que en Bolivia existió un intento de desestabilizar el país, mediante un plan elaborado de no dejar a nuestro candidato y presidente Luis Arce Catacora asuma el mando emanado de las urnas; en Bolivia hubo un intento de magnicidio (…) no es coincidencia que quien participó en el asesinado de un presidente haya estado en Bolivia días previos y posteriores a las elecciones (de 2020) y que el señor Luis Fernando López fue una cuota de poder de Luis Fernando Camacho durante el gobierno de Áñez haya tenido contactos constante con estos grupos irregulares”, añadió.

Además, sin dar mayores detalles, indicó que desde el Gobierno ya saben “qué es lo que están intentando hacer en los próximos días”, que responde, dijo, a una planificación de hace meses.