La Iglesia Católica y 19 Organizaciones No Gubernamentales (ONG) exigen al Gobierno  una segunda vuelta electoral,  para evitar mayores conflictos sociales en el país. 

  La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) planteó convocar a un balotaje, pero con nuevos vocales en el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

“El gran problema de las elecciones en Bolivia es que no se dan a conocer los resultados finales. Creo que el Tribunal Electoral ha perdido toda credibilidad, no solamente con estas elecciones sino ya con las anteriores, y por eso Bolivia vive una incertidumbre. Creo que la salida es convocar a una segunda vuelta, pero será con otro tribunal, porque si seguimos con el mismo el problema continúa”, sostuvo el presidente de la CEB, monseñor Ricardo Centellas, tras concluir  el Sínodo Amazónico que se realizó en Roma, Italia.

La Unión Nacional de Instituciones para el Trabajo de Acción Social (Unitas) y 18 de sus instituciones asociadas expresaron, a través de un manifiesto,  su disconformidad con el accionar del TSE, razón por el cual solicitaron la renuncia de los vocales “por la irresponsabilidad” con la que condujeron los comicios.

También exigieron a las autoridades “viabilizar la realización de la segunda vuelta de las elecciones nacionales, en aras de la pacificación nacional”.

En el manifiesto, los organismos también demandaron una investigación para identificar y sancionar a los responsables de las irregularidades que se registraron en el  proceso electoral e instaron  a la población a exigir el respeto de sus derechos de manera pacífica. 

Además pidieron al Gobierno y agentes del orden  respetar las normas internacionales de protección de los DDHH.