El ingreso de un número más grande de mujeres en cargos de toma de decisiones en los últimos años es un logro que merece celebrarse como un aporte al fortalecimiento de la democracia; sin embargo, aún queda un largo camino por delante, una lucha constante y cotidiana.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la proyección del número de habitantes en el departamento de Tarija para el 2018 es de 563.340, cifra que incrementará para el 2025 alrededor de 633.050 personas. De este total, el 50.5 por ciento son hombres y el 49.5 por ciento mujeres por lo que significa que en relación a números de población tanto hombres y mujeres están iguales.

Lo cual no significa que las mismas proporciones existan entre los cargos de representatividad y de manejo de decisiones en las instituciones públicas o privadas. Si bien en instituciones como la Asamblea Legislativa Departamental se respeta la normativa de paridad, la Gobernación no tiene el mismo número de mujeres liderando sus secretarías, menos una gobernadora.

La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos (DDHH) de la ALDT, Lourdes Vaca, explicó que a pesar de existir normas nacionales constitucionalizadas y leyes vigentes que apuntan a la igualdad de género en la participación política de la mujer, seguimos formando parte de una sociedad machista y conservadora.

“Si bien se cumple la ley a regañadientes de los varones se secunda a las mujeres. No necesariamente ellas están en puestos de legislación”, explicó Vaca y señaló que en el caso de las legisladoras ocupan puestos de suplentes, no de titulares porque así se determinó en la negociación cuando son inscritas en los procesos electorales.
En el caso de la Gobernación, sólo cuentan con una mujer a cargo en la Secretaría de Obras Públicas bajo la dirigencia de Ana María Barja Villarroel.

“Todavía no creen que las mujeres podemos ser la vanguardia en el desarrollo de nuestro departamento. De nada sirve tener leyes que te equiparen estos derechos, si los derechos no son consolidados en puestos de decisión. Nos falta avanzar”, explicó Vaca.

Por otro lado, la alcaldesa de Yunchará, Gladys Alarcón, indicó que en espacios legislativos municipales las mujeres son la mayoría, como por ejemplo de los 75 concejales, 42 son mujeres, pero en los espacios ejecutivos no es el mismo caso, tanto así que sólo existe una alcaldesa mujer.

En el caso de las subgobernaciones, no hay mujeres y tampoco hubo candidatas a Gobernadora.

“Nos alegra que en la ALDT haya estado la compañera Sara Armella que ha demostrado la capacidad en cuanto al espacio que le ha correspondido ejercer. Hay leyes a nivel nacional pero nos está siendo muy difícil lograr estos espacios, creemos que el tema de machismo no solo está en los hombres sino también en las mismas mujeres y esto impide que sigamos en estos espacios de decisión”, manifestó Alarcón.

La alcaldesa explicó que también se debe al temor que siente no solo la sociedad por esquemas machistas en donde se sitúa al hombre en espacios de poder y a la mujer en el casa, estrictamente al cuidado de los hijos y de las tareas del hogar u ocupando cargos que acompañan a los hombres; sino también al miedo que sienten los hombres en admitir que las mujeres pueden ser mejores administradoras de recursos económicos. Además de dirigir las inversiones en las problemáticas sociales, como fortalecer las familias, el desarrollo de los niños, niñas y adolescentes, y fomentar espacios de productividad de mujeres, que en la mayoría de los casos son jefas de hogar.

¿Las mujeres de Tarija conocen sus derechos?

La asambleísta de Unidad Democrática Autonomista (UDA), Lourdes Vaca, señaló que una de las maneras de contribuir al proceso de despatriarcalización, ya sea en los ámbitos laborales o personales, es que las mujeres conozcan a detalle sus derechos. “La mujeres debe conocer sus derechos y en base a ellos saber exigirlos. Es el producto de lo que hemos luchado más de 50 años para que las mujeres tengamos los mismos derechos y condiciones que los hombres”, dijo.