Medio: Página Siete
Fecha de la publicación: martes 30 de marzo de 2021
Categoría: Organizaciones Políticas
Subcategoría: Democracia interna y divergencias
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Evo Morales ya lleva medio siglo de ejecutivo cocalero y máximo dirigente del MAS. Él es el único que se prorroga en sus cargos, tal como quiso hacerlo en la presidencia del país. En cambio, en las demás organizaciones del MAS, como son las confederaciones de campesinos, de mujeres Bartolina Sisa y de interculturales, se produce una rotación de cargos cada dos años, salvo alguna rara excepción en la que un dirigente permanece en el puesto durante dos periodos consecutivos. En general, la vida orgánica de las organizaciones sindicales y más aún las indígenas, impone como norma la rotación de cargos.
Morales ha roto con esa lógica y siempre es reelecto como dirigente sindical y partidario. El apoyo, sin embargo, dejó de ser monolítico y hay sectores que han empezado a cuestionar su permanencia en la dirección del MAS, tras los resultados de las elecciones municipales, que no han sido del agrado del partido oficialista. La renovación, la alternancia o rotación de cargos es un signo democrático y haría bien el MAS en sacudirse para dar paso a nuevos líderes y de paso retener a los descontentos que cada vez son más.