La exministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales, a través de una declaración de carácter legal ante la Fiscalía, afirmó que los opositores que participaron en la reunión convocada por la Iglesia, en el rectorado de la Universidad Católica Boliviana (UCB), entre el 11 y 12 de noviembre de 2019, no estaban interesados en la pacificación del país sino en presionar a Adriana Salvatierra para renuncie a la Presidencia de la Cámara de Senadores.

Morales, quien acompañó a Salvatierra a la reunión, detalló que asistieron Jorge Tuto Quiroga, Luis Vásquez Villamor, Carlos Mesa, Samuel Doria Medina, Ricardo Paz, Roberto Moscoso y Rolando Villena del Conade y Juan Carlos Núñez de la Fundación Jubileo. El objetivo era discutir aspectos de la pacificación del país.

“Los presentes no estaban interesados en la pacificación del país, sino en presionar a Adriana Salvatierra para su renuncia y viabilizar un nuevo gobierno en el que todos ellos participen”, se lee en la declaración testifical de Morales.

Aseguró que quienes decidieron que Áñez iba a ser la presidenta de Bolivia, ante la renuncia de Evo Morales, fueron las personas reunidas en la UCB y “no así los parlamentarios reunidos en una sesión de Asamblea (Legislativa Plurinacional)”.

“Ellos abiertamente preguntaron ¿ustedes aceptarían que la presidenta del Estado sea Jeanine Áñez?, la respuesta de Adriana fue muy clara, al decirles que ‘nos extraña que nos hagan esa pregunta cuando en realidad todos sabemos que Jeanine Áñez está usando la cápsula presidencial para moverse en el territorio nacional y actúa como nueva presidenta del Estado’”, precisó Morales en su declaración.

Indicó que la reunión se extendió, hasta que Salvatierra dijo “nos retiramos”, a lo que Doria Medina señaló: “deben tomar una decisión de inmediato, hoy mismo, de lo contrario operaremos por nuestro plan B”. “(Doria Medina) los miró a todos y todos asintieron con la cabeza murmurando que sí”, refirió.

“Queda claro que su plan B era posesionar a Jeanine Áñez, sin el apoyo de la bancada parlamentaria, del MAS, sin haberse leído la renuncia del Presidente Evo y el Vicepresidente Álvaro García Linera en el Congreso y sin seguirse ningún procedimiento constitucional debido”, aseveró.

Recordó que Áñez fue mencionada en la reunión como una “parlamentaria que representaba a todos ellos”, dado que orgánicamente pertenecía a un partido que desde el inicio había participado en la convocatoria pública a la resistencia a los resultados de las elecciones y a la rebelión de los bloqueos conocidos como “movimiento pitita”.

“Quedó claro que el objetivo de pacificación del país fue solo un pretexto para buscar que la Asamblea Legislativa Plurinacional otorgue su apoyo a una salida constitucional que finalmente no sucedió, claramente los presentes no estaban interesados en la pacificación del país”, concluyó.