La expresidenta del Senado y candidata por Jallalla La Paz a la Alcaldía de El Alto, Eva Copa, consideró que quienes la acusan de derechista o de golpista “ni siquiera aparecieron” cuando el país estuvo en momentos críticos, durante su gestión como titular de la Cámara Alta.
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La candidata de Jallalla La Paz afirmó que “cansa tanta difamación y tanta mentira” por parte de sus opositores.
Eva Copa postula para alcaldesa de El Alto por Jallalla La Paz. / Foto: Archivo
La expresidenta del Senado y candidata por Jallalla La Paz a la Alcaldía de El Alto, Eva Copa, consideró que quienes la acusan de derechista o de golpista “ni siquiera aparecieron” cuando el país estuvo en momentos críticos, durante su gestión como titular de la Cámara Alta.
“Me quieren investigar por el (crédito de 327 millones de dólares del) FMI, empiezan a acusarme de derecha, de golpista, y los que estaban asilados en la embajada… otros ni siquiera aparecieron en nuestro país cuando estábamos en momentos de crisis”, declaró este viernes Copa.
La exparlamentaria y exmilitante del Movimiento Al Socialismo (MAS) se refirió a los resultados de la tercera encuesta de intención de voto, presentados la noche del jueves por CIesmori.
La candidata de Jallalla La Paz afirmó a Unitel que “cansa tanta difamación y tanta mentira”, ya que “la falta de la propuesta te quieren involucrar en cada cosa”.
De esa manera Copa se refirió a las declaraciones del candidato del MAS Zacarías Maquera, quien le dijo a Página Siete que "esa señora (Copa) hasta participó en el golpe. Cuando ingresemos a la Alcaldía, vamos a investigar".
Los sondeos de intención de voto muestran que Copa se perfila como virtual alcaldesa de la urbe alteña, con el 74,9% de preferencia electoral, frente a su escolta Maquera, quien apenas tiene un 6,7%.
De confirmarse los resultados de la consulta difundida anoche, Copa lograría tener gobernabilidad absoluta en el Concejo Municipal de El Alto, al asegurar 10 escaños y hasta podría disputar un undécimo, mientras que a Maquera sólo le alcanzaría para alcanzar un representante, con riesgo de perderlo en la votación.
