Con ese desayuno se cerraba la mini gira del Gobierno Nacional en Tarija donde se han intentado colocar algunos mensajes para apuntalar la candidatura y resolver algunos problemas básicos, como el mantenimiento de la vía Canaletas – Entre Ríos que ya es responsabilidad de la ABC. Con todo, unos y otros empiezan a pensar “demasiado” en la pandemia, y no precisamente en lo que a la salud corresponde.

Las vacunas políticas

En el plan del Movimiento Al Socialismo de utilizar políticamente la llegada de la vacuna Sputnik V hay un serio agujero: el calendario no coincide. Eso lo saben bien los candidatos a las elecciones subnacionales del 7 de marzo, que acudirán a las ánforas con las manos vacías si se vuelcan todas las energías ahí.

Acaban de llegar 20.000 dosis que alcanzarán para 10.000 personas, normalmente médicos y personal de salud de primera línea. Se seguirán recibiendo dosis hasta el mes de mayo en el mejor de los casos, pues todas las farmacéuticas con las que se han cerrado contratos, incluida la rusa, han advertido sobre la imposibilidad de cumplir los volúmenes pactados con los países poderosos.

Para el 7 de marzo el porcentaje de población vacunada será minúsculo, y tal como está evolucionando la segunda ola en el país, más allá del notorio incremento de test diarios, el número de contagios y decesos puede convertirse en un problema, sobre todo en aquellas regiones donde los gobernantes puedan explotar la controversia con el poder nacional. Los casos no dejarán de crecer al menos hasta dos semanas después de carnaval…

El gobernador y candidato Adrián Oliva salió reforzado de la primera ola por lo que dicen los datos: la UTI nunca colapsó y la tasa de letalidad es la más baja del país, datos que son consecuencia de la estrategia de pruebas rápidas, pero también de la disciplina de los tarijeños, disciplina que en esta parte del año se ha relajado soberanamente.

Nuevas denuncias

En el capítulo de “guerra sucia” circularon nuevas denuncias contra el candidato de Unidos Óscar Montes, exalcalde de Cercado durante quince años y primero en las encuestas. Esta vez tienen que ver con la construcción del Mega Center y una supuesta cesión de tres espacios comerciales a la familia de Óscar Montes como contraprestación al “negocio” por parte del español Julio Chaparro, promotor de la obra.

Cabe señalar que la obra se construyó en comodato a 30 años, plazo en el que la Alcaldía tomará posesión de la inversión. En cualquier caso, no medió un concurso de ideas ni otra iniciativa sobre el uso del lote cedido por el municipio, sino que se trató de una negociación directa.

Unidos mantiene la idea de no entrar a la discusión y circunscribirla a la guerra sucia, aunque en el asunto del bicicross y la obra fantasma señalan al alcalde heredero, Rodrigo Paz, y su incapacidad de seguir con los proyectos. De momento todo queda en eso.