“...Tenemos a bien pedirle que, en atención al pésimo historial en materia de derechos humanos que ostenta en su condición de funcionaria del régimen autoritario de Bolivia, tenga usted a bien abstenerse de votar a favor de la candidata Nardi Suxo Iturry”.

Con ese pedido,   Human Rights Foundation (HRF) envió una carta a todos los embajadores con representación permanente ante la Organización de Estados Americanos (OEA).

Durante la 48 Asamblea General que se desarrolla  en Washington, los miembros de la OEA  tienen previsto designar hasta este miércoles a tres jueces de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), de entre cuatro candidatos: Humberto Sierra Porto (Colombia), Eduardo Ferrer Mac-Gregor (México), quienes buscan la reelección. Además postulan  Ricardo Pérez Manrique (Uruguay) y  Nardi Suxo  (Bolivia).

De acuerdo con  la carta que envió la fundación, “la exministra Suxo jugó un rol fundamental en la eliminación de la independencia del Poder Judicial en Bolivia, y el uso de jueces y fiscales para perseguir a opositores políticos del Gobierno”. En la misiva se detalla  que ella formó parte del gabinete jurídico del Ejecutivo. 

En la nota se agrega que en junio de 2010 Suxo fue acusada -no existe denuncia formal ante el Ministerio Público-  por tráfico de influencias en caso de seguros y por encubrimiento.

En criterio de la fundación,  Suxo es funcionaria de un régimen no democrático porque el gobierno de Evo Morales “no es ya un régimen democrático conforme a los principio de la Carta Democrática Internamericana”.

Con esas referencias, la Human Rights Foundation considera que el cargo de juez de la Corte IDH “no puede recaer en manos de una persona que ha sido funcionaria de un régimen autoritario, y que como tal tiene más bien un prontuario que debería ser aclarado ante la justicia de un país democrático”.

     José Miguel Vivanco, director de HRF  para  América,  en su cuenta de Twitter, justificó que la nota enviada a los diferentes Estados es porque “su récord como embajadora sugiere que ella no ha sido postulada por su compromiso con los DDHH, sino por su lealtad a Evo Morales”.

  En su cuenta oficial de Twitter, la exministra Suxo escribió en su presentación que es “Militante del Proceso de Cambio”.

  Para las autoridades del Gobierno, Suxo es la mejor candidata para que ocupe el cargo de jueza de la Corte IDH, por su trayectoria profesional.
 

El Ministro de Justicia, Héctor Arce, en una anterior oportunidad, lamentó que personas procesadas por la justicia boliviana difamen a Suxo.

“La doctora Nardi Suxo es una profesional boliviana que tiene una larguísima trayectoria en defensa de los derechos humanos. Ella ha trabajado no sólo en instituciones bolivianas, vinculadas a la defensa de los derechos humanos, sino en otras internacionales, como el Centro Carter”, aseguró el Ministro.

Por su lado, la exministra   Amanda Dávila, escribió: “¡Es la mejor candidata por su trayectoria de vida defendiendo los Derechos Humanos de los más excluidos! Además de excelente abogada, es una mujer valiente que se enfrentó a las roscas corruptas de quienes gobernaron en beneficio propio”.

De los cuatro postulantes, Suxo fue la que más críticas recibió durante el proceso de evaluación. En un  foro de candidatos a la Corte IDH, que se realizó en mayo pasado en Estados Unidos, Suxo  fue  increpada  por el 21F y el apoyo a Siria.

Es la primera vez que Bolivia   postula un candidato para que sea juez o jueza de la Corte IDH,  que depende de la OEA.

 En 2015, Bolivia postuló a la exsenadora Sandra Soriano, del Movimiento Al Socialismo (MAS),  para una de las cuatro plazas vacantes en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

 La candidatura de Soriano fue cuestionada por un panel de expertos, que observó la falta de independencia de la exlegisladora, precisamente por su vinculación con el partido en función de Gobierno.

 Punto de vista
aRTURO yáÑEZ  Constitucionalista

 Campaña contra Suxo se debe a su vinculación con el régimen

Primera vez que Bolivia presenta una candidata a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).

  Ahora, nunca vi una campaña tan abierta en contra de un candidato. Es demasiado evidente que la señora Nardi Suxo está despertando una enorme alarma en quienes confiamos en el sistema interamericano, más allá de que sólo cumple requisitos, nada más. 

  Creo que todos estos cuestionamientos se deben a su directa vinculación con el régimen, además por el desempeño que tuvo  en la defensa de los derechos humanos. No olvidemos, por ejemplo, que impulsó la retroactividad en la ley penal, lo cual viola los derechos humanos.