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Medio: El Día
Fecha de la publicación: domingo 29 de noviembre de 2020
Categoría: Procesos electorales
Subcategoría: Elecciones subnacionales
Dirección Web: Visitar Sitio Web
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Unidos, los ciudadanos de todos los rincones de país se libraron de un dictador que otra vez nos tiene en jaque, preparando la guillotina y haciendo espacio en las mazmorras para meter allí a los que pelean por la democracia. Todavía resulta increíble que una victoria tan grande, la más preciosa que nos haya dado la democracia, se nos haya escapado de las manos por culpa de la mezquindad y la egolatría de unos cuantos.
Hemos vivido un largo proceso de resistencia, de persecución y de angustia por el liberticidio que se está ejecutando, pero ni siquiera esas pruebas tan duras lograron que la clase política tome conciencia de la necesidad de unir fuerzas contra la dictadura. La ciudadanía, el movimiento cívico, las agrupaciones juveniles y las organizaciones femeninas tuvieron que asumir el protagonismo que hizo historia a partir de 2016 y que consagró la epopeya de octubre de 2019.
Pero los mismos actores de la partidocracia nacional la embarraron y deshicieron todo lo que se había conseguido hasta ponernos nuevamente en la picota, con el riesgo de prolongar por mucho tiempo la destrucción de la nación y agravar aún más el estado de indefensión del pueblo frente al abuso de los que no miden consecuencias con tal de mantenerse en el poder.
El 18 de octubre tuvimos que chocarnos contra el gran muro que nos dejó estupefactos y es posible que este trauma nos haga reaccionar y cambiar de dirección. No todo está perdido. En marzo de 2021, la democracia nos dará una nueva oportunidad que consiste en volver a plantarle cara al autoritarismo en ese recinto poderoso que son las urnas.
El panorama no es alentador y prueba de ello es la avalancha de candidaturas a las elecciones regionales y municipales que, en principio, anticipan una dispersión descomunal de la voluntad popular, con el riesgo de que el MAS pueda conseguir un dominio territorial que jamás ha podido consolidar, pese a todo el derroche de recursos y de actos de manipulación.
En vista de este escenario adverso, el Comité Cívico cruceño ha conseguido un principio de acuerdo entre las fuerzas democráticas, que parecen estar dispuestas a diseñar una estrategia para las elecciones subnacionales basada en la unidad. No hay motivo para celebrar, pero al menos se puede pensar en el surgimiento de algunos gestos de madurez entre los líderes que dicen luchar por la libertad, pero que deben comenzar por la coherencia y el desprendimiento. De otra manera habremos sepultado para siempre la aspiración de recuperar la democracia.
En vista de este escenario adverso, el Comité Cívico cruceño ha conseguido un principio de acuerdo entre las fuerzas democráticas, que parecen estar dispuestas a diseñar una estrategia para las elecciones subnacionales basada en la unidad.