Erika Segales  / La Paz 

El jefe de la bancada del MAS en el Senado  Luis Flores  sostiene que en las elecciones  el partido azul recibió una oportunidad y considera que se debe escuchar más a la gente. 

En entrevista con Página Siete, habla también sobre el rol de Evo  en el MAS, en el Gobierno y en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), entre otros detalles.

 ¿En qué se diferencia el MAS que entró a la ALP  este mes con el que terminó su mandato?

En esta elección con el presidente Luis Arce y el vicepresidente David Choquehuanca se da una suerte de oportunidad al MAS. El expresidente Evo Morales tuvo muchos aciertos;  es importante recordar la disminución de la extrema pobreza, la mejora de la economía, el crecimiento del PIB y otros que se pueden resaltar.

Hubo algunas críticas, que llevó algún cuestionamiento de la sociedad, pero a partir de la elección del 18 de octubre, lo que se da en el país es una oportunidad, con una gran mayoría de bolivianos apostando para mejorar la situación de manera general y corregir algunos errores.

Eso es lo que debería recoger la gestión del presidente Arce y Choquehuanca, corregir algunos errores escuchando más a la gente, a los sectores sociales, al pueblo boliviano. Lo que nosotros estamos haciendo ahora es coordinar con el Ejecutivo, pero con autonomía. Se escuchan todos los criterios que tienen los senadores tanto en reuniones internas de bancada, como en las sesiones públicas. No conozco al anterior Legislativo.

¿Qué papel juega Evo Morales en el Gobierno y en el MAS?

Él tiene un papel político, va a estar como responsable de la selección de candidatos a alcaldes, concejales, asambleístas y gobernadores. Con seguridad se encargará de la campaña. 

Es un líder del instrumento, a diferencia de lo que se quiera mezclar con el papel del presidente Arce, quien junto a Choquehuanca tienen un papel de gestión de gobierno y bajo su responsabilidad está el programa para mejorar la economía, la salud, la educación, etc. Ese es el papel que tiene uno y otro, totalmente diferente. 

El otro día Morales pidió a los presidentes de la ALP interpelar al presidente del TSE. ¿Cuál es el peso que tendrá Morales en la ALP?

Todos los consejos que puede dar públicos o no, cualquier líder, incluido Evo Morales, son bienvenidos para cualquier instancia, en este caso el Legislativo. Y pueden dar un consejo seguro a cualquier otro poder específico; sin embargo, los poderes de manera independiente analizan lo que sea mejor para el país.
 

¿Cómo ven y qué esperan ahora de la nueva oposición?

No observamos mucha diferencia con la oposición anterior. No observamos propuestas específicas de fondo para mejorar el país. Hay una oposición que hace cuestionamientos de forma. En el diálogo, oficialismo y oposición deberíamos trabajar en dar solución a problemas de fondo.
 

Se enfatizó en que la supresión de los dos tercios  no implicaría cambios sustanciales; sin embargo, se indica que la moción de cierre del debate es una forma de anular la opinión de minorías. ¿Qué opina sobre ello?

El debate de mayorías y minorías no es el debate profundo del país, no es el debate de llevarle la solución al creciente número de bolivianos,   por ejemplo, que está aumentando en extrema pobreza y pobreza moderada.

 Debemos debatir cómo mejorar la economía, cómo disminuir el desempleo en el país, los invitamos a iniciar el debate en ese sentido. El llamado dos tercios es constitucional, legal y democrático; nosotros no hemos coartado la palabra hasta el momento a los senadores de oposición ni de oficialismo; sin embargo, el instrumento de suficiente discusión existe en poderes legislativos de otros países, con diferentes opciones.

¿Qué piensa de incrementar el presupuesto para salud?  Este es un proyecto postergado desde el 2015,  ¿será viable por parte de la nueva mayoría?

El debate fundamental deben ser soluciones específicas, no un porcentaje. No se puede hablar de porcentajes en esta crisis, porque la disminución de los ingresos del Estado ahora debe ser una de las más graves de los últimos 40 años. Hay que despegar en el tema económico, superar la crisis económica y después buscar las soluciones en aspectos tan importantes como educación, salud y otros.

Usted es parte de la Comisión de Política Internacional. ¿Cuáles son los temas pendientes en la agenda internacional?

La preocupación inicial de la comisión es reconstruir nuestras relaciones con diferentes países. Es de conocimiento que en su generalidad el tema de los embajadores se destruyó hace un año aproximadamente y estamos esperando las propuestas del Poder Ejecutivo para considerarlas en la comisión y en la sesión del Senado. 

Estamos esperando a las personas que puedan reconstruir esa relación que tenemos con países, pero también con el ALBA-TCP, la Celac, la Unasur, la ONU, la OEA, con todos los organismos internacionales de integración con los que nuestro país tenía una excelente relación y tenemos que buscar nuevamente esa relación de pueblos, de países, que en realidad en este momento no hay.

 Se han expresado diversas señales de restablecer relaciones a nivel embajadas con EEUU. ¿Cree que hay margen para esto?

La política internacional de nuestro país la dejamos a propuesta del Poder Ejecutivo. Ellos proponen y nosotros aprobamos. Vamos a tener las visitas a la comisión de personeros y del propio canciller Rogelio Mayta para conocer la política de trabajo que se tendrá en organismos y embajadas a nivel de otros países.

¿Cómo se retomará el tema mar desde el Legislativo?

Debemos abrirnos al diálogo, al debate sobre el tema marítimo. Bolivia nunca va a dejar la reivindicación marítima de lado. Bolivia siempre estuvo y seguirá abierto al diálogo sobre todos los temas con Chile incluyendo  esa reivindicación marítima.

¿Qué papel jugará la Comisión de Política Internacional con el GIEI de la CIDH?

Todas las comisiones, incluyendo la nuestra, con seguridad aportarán información. Muy especialmente la Comisión de Justicia presidida por la senadora Patricia Arce, que va a poder aportar a lo sucedido en Sacaba, Cochabamba. Ella fue víctima con muchísimas pruebas de la vulneración de muchos derechos humanos.

 Es obligación de todos los senadores y diputados cooperar y ayudar para que la investigación sea transparente, creíble y que de una vez Bolivia tenga escrita de manera independiente la historia