“A partir de eso se arruinó todo, porque de ser extraordinarios pasamos a ser ordinarios, fue un error”, remarcó Arias en una entrevista con Cadena A. En criterio del ministro, la candidatura opacó todas las acciones positivas del Ejecutivo porque los medios de comunicación y la opinión pública les juzgaron como a cualquier otro postulante a los comicios y “cualquier defecto que cometíamos, se convertía en grande”.

«Los medios de comunicación eran implacables porque éramos candidatos y nos tenían que tratar a todos (igual), como corresponde; en cambio, si no hubiésemos sido candidatos, yo creo que otro hubiera sido el cantar, o sea, hubiésemos sido extraordinarios», sostuvo.

Reconoció que no supieron “vender muy bien” los aciertos que tuvieron durante estos 11 meses de gestión, pero aseguró que Áñez hizo cosas “muy grandes” en ese periodo. “Yo me siento muy orgullo de las cosas que hemos hecho, hemos trabajado fuerte, los ministros nos hemos metido mañana, tarde y noche, (aunque) no exentos de errores, de metidas de pata».

Según el cómputo oficial del Tribunal Supremo Electoral (TSE), al 88% de actas computadas, Luis Arce, del Movimiento Al Socialismo (MAS), es el presidente electo de Bolivia, algo que Áñez intentó evitar con la declinatoria de su candidatura.