Cree que la más complicada será Jeanine Añez por amenazas de juicios de responsabilidad por temas de corrupción en la pandemia, endeudamiento y probablemente gastos a favor del agronegocio, y no tendrá ni un solo diputado o senador que la defienda.

Dijo que por el mismo camino transitó Libre 21 porque detrás de la alianza estaba el MNR y con la renuncia de Tuto Quiroga, no tendría ningún diputado, aunque tampoco se veía que sacaría algún escaño parlamentario por el escaso apoyo ciudadano.

Sostiene que con el ingreso de Comunidad Ciudadana de Carlos Mesa y Creemos de Luis Fernando Camacho, se puede observar una renovación, pero el desafío es ver hacia adelante si podrán sostenerse en el tiempo, tener una visión de país y constituirse como alternativa política nacional más adelante.

Indica que los otros derrotados son aquellas plataformas que impulsó Carlos Sánchez Berzaín para boicotear la elección, e incluso hay un conjunto de actores como Carmen Eva Gonzales, Eduardo León que, si bien no pertenecen a un partido político, apostaron a otras acciones para generar desestabilidad y postergar las elecciones.

“Estas corrientes que buscan imponer el poder a través de la fuerza, acabaron trituradas con el voto en medio de una crisis política, avivada por el fraude del año pasado”, dijo al indicar que los fraudes de los años 40, 50, 78 dieron lugar a nuevos escenarios como la UPD que logró ingresar al poder.

El año pasado hubo un fraude que podría haber enterrado al MAS, pero en este caso se puede abrir un nuevo ciclo porque está claro que el país vivirá uno o dos años más de crisis, y habrá un período de transición que puede cerrar un ciclo a unos y abrir a otros.