La lucha por la capitalía, los hechos luctuosos de la Calancha,  y las agresiones que sufrieron los campesinos el 24 de mayo de 2008,  son otros puntos que marcaron un alejamiento entre la región y el Jefe de Estado.

El tema de la capitalía

En agosto de 2006 se instaló la Asamblea Constituyente,  con el objetivo de redactar la nueva Constitución Política del Estado. En marzo de 2007, Sucre inició la campaña para ser declarada capital plena del país. “Esta es una herida histórica que Sucre nunca pudo sanar. El Gobierno nos cerró las puertas ante algo que es nuestro derecho”, explicó la diputada de Unidad Demócrata, Lourdes Millares. 

Las protestas de diferentes sectores fueron contundentes, pero al final, Sucre perdió la batalla. El propio presidente Morales  pidió a los chuquisaqueños  congelar su demanda para evitar división en la región.

    La Calancha

“Este es un hecho que goza de impunidad, no se han hallado a los responsables”, manifestó la diputada  Millares.

 En noviembre de 2007,  la Asamblea Constituyente decidió trasladar sus sesiones del Teatro Gran Mariscal al Liceo Militar en La Calancha, a unos cinco kilómetros de la capital, debido a que  sectores se oponían a las sesiones  por el rechazo de incluir en el debate el tema de  la capitalía. Las protestas generaron enfrentamientos con la Policía y fallecieron tres personas.

 
  Racismo, mayo de 2008

El 24 de mayo de 2008 marcó otro hito de ruptura. Cuando se pensó que la herida por la batalla  perdida de la capitalía sanó;  aquel día, el Comité Interinstitucional obligó a  campesinos a marchar semidesnudos y en medio de agresiones verbales y físicas los obligaron a besar la bandera chuquisaqueña.   “Lo que pasó es que había mucha molestia contra el Gobierno por parte de algunos sectores. La capitalía siempre dolerá”, dijo la diputada del MAS, Epifania Zenteno.

Incahuasi

Chuquisaca argumenta que el megacampo Incahuasi es compartido con Santa Cruz pese a que un estudio realizado por una consultora internacional en  2017 indicó que el 100% de las reservas se encuentra en  territorio cruceño.  

     Recientemente el Comité Cívico  y otros sectores  presionaron al Gobierno para que se realice una nueva delimitación con un paro de nueve días, huelga de hambre y bloqueos pero no lograron arrancar nada.

La pérdida por el campo Incahuasi generó “un dolor profundo” en Chuquisaca y “no habrá nada que lo cure”, afirmó  la diputada del MAS, Arminda Zenteno. La parlamentaria señaló que con el segundo estudio -cuyo resultado ratifica el de 2017-  Chuquisaca “perdió parte de su territorio”, lo que significa la pérdida de una gran cantidad de recursos.

 La polémica generó pugnas internas en el MAS, que  alcanzaron  a  dos ministros que apoyaban a Chuquisaca y Santa Cruz.  

Para el analista Jorge Dulón, este conjunto de momentos en los   que el Gobierno no priorizó a la capital del país, generaron esta crisis, además de la diversidad política de sectores que  no responden al MAS.

 “El Gobierno se relajó demasiado, pensando en que la relación con Chuquisaca no iba a afectarse tanto. Ahora es complicado. La gente que en su momento apoyó al MAS,  ya no está dispuesta a hacerlo por un tema histórico y político, después del caso Incahuasi”, dijo.