Loayza dijo que no se puede aceptar la candidatura Arce porque durante la gestión de Morales, el Gobierno se entregó a la derecha y a la “peor derecha”.

“Por eso instruyo a los exdirigentes que me han colaborado en este instrumento político y también actuales dirigentes, que no se conviertan en pongos, en escalera de ningún partido tradicional, mucho menos del MAS”, manifestó Loayza según informó Erbol.

Asimismo, sostuvo que Arce “si fuese candidato descendiente quechua o aymara hubiese tenido el apoyo de él; por eso los masistas ya no pueden hablar del MAS como un instrumento del pueblo sino de un partido tradicional, peor que la derecha”.

PAN-BOL

Respecto a las Elecciones Generales de octubre, Loayza dijo estar seguro que junto a PAN-BOL, restarán el voto de los masistas para que nunca más vuelvan a ser gobierno y que Morales, cuando retorne al país, “se pudra 30 años en la cárcel por sus demandas judiciales que tiene”.

En ese marco, pidió a los dirigentes del MAS, que se sumen al proyecto político de PAN-BOL que según él, “se convertirá en un instrumento político de liberación”, debido a que los dirigentes entregaron la conducción partidaria a las organizaciones sociales para trabajar en las elecciones subnacionales.

RESENTIMIENTO POLÍTICO

Por su parte, el diputado del MAS, David Ramos dijo que las afirmaciones de Loayza son “declaraciones de un resentido político” y sostuvo que el pueblo boliviano sabe cuál es la propuesta del partido azul, para el manejo de la economía.

Mientras que la diputada indígena del mismo partido, Lidia Patty Mullisaca dio la razón a la molestia de Loayza y sugirió al candidato, tomar contacto con el fundador del IPSP para que “sigan empujando el carro hacia la misma dirección”.