En los últimos días, creció el rumor que tenía por objeto ensalzar a López como potencial reemplazante de la beniana al frente de Juntos. Esto, enmarcado en un contexto de crisis en el que, según algunos especialistas, se pronunció el debilitamiento de la figura de Áñez.

El inciso 3 del artículo 238 estructurado dentro de la Constitución Política del Estado (CPE) parece presentarse como principal obstáculo para que López pueda asumir la candidatura. Este refiere que aquellos que se desempeñen en cargos de designación no estarán en condiciones de optar por puestos electivos si no renunciaron faltando un mínimo de tres meses para los comicios.

En un presente teñido por una pandemia y una emergencia excepcional, todo es probable, de acuerdo con Cordero. “Es cierto que tendría un impedimento, en ese sentido, López, pero hablamos de la hipótesis de que la Presidenta renuncie. Según la norma (el Ministro), debería haber renunciado tres meses antes, y como no lo hizo, no se puede habilitar. Sí, pero estamos en una situación de emergencia. También podríamos decir que Añez no podría haber asumido la presidencia porque no fue elegida. Sí, pero estamos viviendo una situación de crisis ¿El TSE (Tribunal Supremo Electoral) actuará pegado a la ley y le dirá que no a Juntos? Van a buscar una solución equilibrada. Responderá: ‘bueno, es una situación excepcional, ¿quién será su candidato?, ¿el señor López?, ah, bueno’. No es descabellado”.

Y pese a que dicha posibilidad no debe ser descartada según el analista, considera poco probable que la exsenadora dé un paso al costado en la pelea electoral del, por ahora, 18 de octubre. “La van a sostener. El partido hará todo lo posible para que no renuncie”, dice.