"Bolivia tiene dos caminos: el camino del bloqueo, del luto y del dolor que le propone el MAS; o el camino del diálogo, el camino de la salud, de la reactivación económica y la generación de empleos que les proponemos nosotros", expresó la Jefa de Estado, a través de su cuenta en Twitter (@JeanineAnez).

Los sectores sociales afines al MAS, convocados por la Central Obrera Boliviana (COB), iniciaron el pasado 3 de agosto con el bloqueo indefinido de carreteras en demanda de que las elecciones generales se realicen el 6 de septiembre y no el 18 de octubre, como determinó el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Esta medida de presión, en medio del momento más crítico de la pandemia, generó una serie de cuestionamientos porque durante los primeros días de conflicto, incluso, se evitó el paso de los camiones con oxígeno medicinal, lo que provocó, según información del Gobierno, al menos una treintena de fallecidos en distintos hospitales.

Entre tanto, el escenario de diálogo, propiciado para solucionar el conflicto, todavía no logró una respuesta esperada de parte de los dirigentes que impulsan la medida de presión y quienes amenazan con seguir radicalizando las protestas, mientras empieza a escasear, además del oxígeno y medicamentos, alimentos en las ciudades.

Anoche, el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, afirmó que se trabaja de manera intensa en la búsqueda de la solución a la crisis política en Bolivia tratando de evitar una posible "guerra civil".

"Estoy metido las 24 horas al día buscando la solución al conflicto, tratando de que se evite una guerra civil, nosotros estamos tratando de evitar una guerra civil en este país, (pero) tenemos las horas contadas para ello, se lo garantizo", dijo Murillo, en una entrevista con el periodista Fernando del Rincón de CNN. /ABI