Entre sábado y domingo, los órganos Legislativo, Ejecutivo y Electoral instalaron encuentros a los que asistieron diferentes invitados, pero que no lograron arribar a un acuerdo que ponga fin a las medidas que ahogan al país.

“Hay dos aspectos que están entorpeciendo el tema del diálogo. El primero, hay muchos actores que están en las calles pidiendo que las elecciones, si son el 18 de octubre, sean a través de una ley, el otro es que las bases han rebasado al Movimiento Al Socialismo (MAS)”, refiere el abogado constitucionalista Paul Antonio Coca.

Dijo que, si bien la convocatoria del Legislativo que representa al MAS por sus dos tercios tuvo mayor participación de actores sociales, ésta no dio ningún resultado positivo para destrabar esta crisis que aqueja al país.

Para Patricia Velasco, politóloga, otro factor es el hecho de que hay sectores radicales que en cada bando están tomando protagonismo y dificultando que el diálogo avance.

“Lo que separa a unos de otros al momento de alcanzar metas no es sólo el camino que se toma para llegar a ellas, sino en la libertad para decidir haber asumido con plena conciencia que las decisiones tienen consecuencias sobre alguien más y que frente a estas serán juzgados”, reflexiona.

De acuerdo con Velasco, lamentablemente, el gobierno de transición de Áñez se ha debilitado y perdió autoridad. A esto se suma que la candidatura de la Presidenta provocó rechazo en gran parte de la ciudadanía.

Según el constitucionalista José Luis Santistevan, el diálogo fracasó por la falta de representatividad de las autoridades transitorias, que dejó, además, que con sus errores el MAS vuelva a cobrar musculatura.

“El proceso de transición ha llegado a su fin, que quiere decir que el Gobierno ha cometido tantos errores y uno de ellos es la candidatura de la Presidenta, de manera tal que hay gobierno pero no hay autoridad. El Gobierno no cumplió con el mandato de llevar adelante los cambios que establecieron las crisis de octubre y noviembre”, mencionó.

Por otra parte, Coca sostiene que los puntos de demanda de los bloqueadores se diversifican día que pasa, es así que en muchas regiones ya se ha instalado la versión de “renuncia de la presidenta Áñez”.

“La fecha se ha convertido en una mera excusa porque quienes estaban en el poder y hoy día ya no están son los que de una vez quieren el proceso electoral porque ellos ya no se ven otro día más fuera del poder”, señala.

A su vez, Santistevan sostiene que hay un proceso electoral en riesgo y que a partir de eso ningún diálogo va a surtir efecto si es que no se accede a la posibilidad de descomprimir el calendario electoral y ver la posibilidad de acordar una nueva fecha. “El TSE se ha endurecido en su ortodoxia y no quiere mover a ningún lado el 18 de octubre, una salida es descomprimir el calendario para fijar nueva fecha”, indica.

Agrega que lamentablemente la agenda de transición se ha extraviado, y no por la pandemia, sino por el accionar de las autoridades transitorias, que tienen acusaciones de corrupción, pero lo más importante es la exigencia de las personas de restablecer el estado de derecho.

“No ha cumplido con lo que fue el restablecimiento del Estado de derecho y obviamente seguir todos los procesos en contra del gobierno del MAS, y a esto se suma el surgimiento de su candidatura”, asegura Santistevan.

Evo pide tomar en cuenta acta propuesta por el TSE

Desde la lectura del expresidente Evo Morales, los sectores movilizados deberían considerar el acta de entendimiento planteada por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para garantizar las elecciones generales porque cree que buscar otros caminos, como exigir la renuncia de la Presidenta, llevaría a alargar más el proceso electoral.

“El movimiento movilizado por la democracia tiene dos caminos. (…) Fuera (Jeanine) Áñez, que significa otro presidente (transitorio y una) nueva convocatoria (de las elecciones), porque se trata de democracia, no se trata de que yo saco, yo entro ahora. (…) Eso a mí me preocupa, (porque) coincide con la posición del Gobierno de facto, como hace un momento leía, (de llamar a una) nueva convocatoria (a elecciones). Lo otro es esta propuesta (del acta de entendimiento)”, señaló Morales.

En contacto con radio Kawsachun Coca, la exautoridad de Bolivia dijo estar preocupado porque la demanda de los movilizados pretende dar un giro hacia el pedido de la renuncia de la mandataria y no así en exigir elecciones para este año.

Es en ese sentido que Morales llamó a los movilizados a considerar el acta de entendimiento que fue planteada por el TSE. La misma tiene como antecedente la reunión entre el presidente del TSE, Salvador Romero, y el presidente en ejercicio del Senado, Milton Barón, tras la cual se acordó contar con una ley que permita garantizar la realización de las elecciones para el 18 de octubre.