El Tribunal Supremo Electoral (TSE) presentó este lunes en el Ministerio Público una querella penal, contra los presuntos autores de la manipulación de los resultados de las Elecciones Generales del 20 de octubre del 2019.

«La Sala Plena del Tribunal Supremo Electoral, en su condición de Máxima Autoridad Ejecutiva, ha presentado ante el Ministerio Público la querella penal contra quienes resultaren autores, cómplices, instigadores y/o encubridores de la presunta comisión de los delitos electorales», señala el comunicado.

Anteriormente el presidente del Órgano Electoral, Salvador Romero, manifestó que la sala plena estaba evaluando la forma en que se sumarían al proceso penal, que inició de oficio la Fiscalía General contra los exvocales de esa instancia.

La querella es por los  delitos de falsificación de documentos, uso de instrumento falsificado, manipulación informática, alteración y ocultación de resultados, que están previstos en la Ley 026 del Régimen Electoral.

Además hace mención a resoluciones contrarias a la constitución y a las leyes,  incumplimiento de deberes, enriquecimiento Ilícito y también pide la investigación de fortunas de los implicados.

«El Tribunal Supremo Electoral se suma a esta demanda para contribuir en el esclarecimiento de los hechos ocurridos el año 2019», indica el documento.

A la vez recordó que el Órgano Electoral y los  Tribunales Departamentales, colaboraron de forma constante con las investigaciones y los requerimientos que solicitó el Ministerio Público.

En reiteradas oportunidades la Procuraduría General del Estado (PGE), cuestionó que el TSE y a los tribunales no hayan presentado ninguna demanda contra las exautoridades. Tras enviar una nueva nota el 2 de junio, seis de los nueve tribunales se sumaron a la demanda contra las exautoridades departamentales que también son investigados por el presunto fraude electoral.

El 10 de noviembre, la Misión de Observadores Electorales de la Organización de Estados Americanos (OEA), presentó el informe  preliminar de la auditoría que realizaron a los resultados de las elecciones generales del 20 de octubre del 2019, donde concluyó que hubo una «manipulación dolosa» de los resultados para beneficiar al candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS).

La auditoría ocasionó la renuncia de Evo Morales a la presidencia y salió del país para aislarse en México y posteriormente el Argentina. Mientras que los seis exvocales del TSE fueron enviados a la cárcel, a la fecha sólo uno de ellos logró beneficiarse con detención domiciliaria.