Según el reporte, dos concejalas titulares de Esmeralda, una de Challapata, otra de Soracachi, y una del municipio de Yunguyo de Litoral, todas pertenecen al Movimiento Al Socialismo (MAS) y presentaron sus respectivas renuncias en el mes de enero, asimismo en el mismo mes la asambleísta departamental representante de la provincia Litoral, Verónica Mabel Cáceres, también del MAS, presentó su renuncia voluntaria a inicios de esta gestión.

En febrero, la concejal titular del municipio de Soracachi, del partido Fuerza Integración Campesina (FIC), y en marzo la concejal de Caracollo, representante de Participación Popular (PP), renunciaron a sus cargos.

Dichas renuncias antes de ser aceptadas por el TEDO, pasaron una serie de procedimientos para constatar que las mismas eran voluntarias y no así por acoso y violencia política, una vez terminados los pasos respectivos, las renunciantes firmaron un documento para constatar el carácter voluntario de su decisión. 

En muchos de los casos el motivo se debe al cumplimiento de un acuerdo por usos y costumbres con las comunidades o sectores a los cuales representaban, el cual consiste en que una vez cumplido media gestión de la legislatura se tenía que dar paso a sus suplentes. 

Cabe recordar que el TEDO, en los primeros cuatro meses del 2018, recibió dos denuncias de acoso y violencia política, los cuales actualmente fueron remitidos al Ministerio Público para su atención; ambos casos se tratan de dos concejalas, una del municipio de Huari y otra del municipio de Huayllamarca.