Nuñez informó que el Gobierno vio la necesidad de conversar con diferentes sectores de la sociedad boliviana para socializar las medidas de la cuarentena y los avances de la lucha contra la pandemia del coronavirus en territorio nacional, con la finalidad de mantener informada a la población. Uno de esos sectores es la iglesia católica.

“Las consideraciones que fueron planteadas en la homilía del domingo, no generan malestar en el gobierno, sino profunda reflexión sobre lo que estamos haciendo y lo que debemos hacer” señaló la autoridad.

Agregó que se pidió a la Iglesia Católica su colaboración para generar espacios de diálogo y comprensión entre bolivianos para que de esta forma se pueda afrontar de mejor manera la pandemia por la que el país y el mundo atraviesan en la actualidad. Estos espacios buscarán no favorecer a los sectores minoritarios y con intereses políticos que tratan de desestabilizar la institucionalidad del país para mediante el desacato de la cuarentena y la convulsión social para desestabilizar al gobierno constitucional.

Por su parte, el representante de la Iglesia Católica, Aurelio Pesoa, manifestó que la iglesia siempre ha estado predispuesta a colaborar con el Gobierno de Bolivia sin importar a que ideología represente cada gobernante en turno.

“La Iglesia Católica en tiempos pasados cuando había un gobierno de derecha decían que era de izquierda, después cuando hubo un gobierno de corte socialista decían que era de derecha; sin embargo, quiero decir que con cualquier Gobierno nos sentimos comprometidos en buscar el bienestar no solamente de algunos, sino de todos los bolivianos” refirió el religiosos a la salida de la reunión con personeros gubernamentales.

Pesoa también agradeció el tiempo prestado por el gobierno de la presidente Jeanine Añez y sus ministros, para poder expresar sus impresiones y brindar sugerencias para colaborar en la medida de sus posibilidades.