Medio: ANF
Fecha de la publicación: miércoles 13 de mayo de 2020
Categoría: Conflictos sociales
Subcategoría: Problemas de gobernabilidad
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Cochabamba, 13 de mayo (ANF).- Pobladores afines al MAS que bloqueaban el ingreso al botadero de basura de K’ara K’ara, en Cochabamba, exigiendo obras públicas y la renuncia de la presidenta Jeanine Áñez y del ministro del Gobierno, Arturo Murillo, agredieron a un grupo de periodistas que se trasladó al lugar el martes al medio día para dar cobertura a los hechos.
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Cochabamba, 13 de mayo (ANF).- Pobladores afines al MAS que bloqueaban el ingreso al botadero de basura de K’ara K’ara, en Cochabamba, exigiendo obras públicas y la renuncia de la presidenta Jeanine Áñez y del ministro del Gobierno, Arturo Murillo, agredieron a un grupo de periodistas que se trasladó al lugar el martes al medio día para dar cobertura a los hechos.
Entre el grupo de periodistas estaba el equipo de prensa del canal privado de televisión Red Uno, integrado por Daniela Rojas y por el camarógrafo Alberto
Delgadillo. También fueron agredidos los enviados de los diarios Opinión y Los Tiempos.
Rojas relató a la Unidad de Monitoreo de la ANP-Diarios que se disponían a transmitir la noticia desde su unidad móvil para el noticiero de mediodía, cuando fueron agredidos.
“Llegamos hasta la zona del conflicto y un joven se acercó para preguntarnos si queríamos entrevistarlos. Le dijimos que sí, pero enseguida sentimos el paso apresurado de un grupo de personas que nos rodeó”, refirió Rojas.
Dijo que quisieron explicarles que su presencia en el lugar era solo para informar y si ellos estaban de acuerdo para una entrevista en vivo sin edición como exigían, pero “fue inútil, no entendían razones, nos rodearon, empujaron y gritaron todo tipo de insultos”.
Señaló que tras sentir la agresión quisieron salir del lugar anunciando a los manifestantes que se retirarían, que no era necesaria la agresión, pero todo fue inútil.
“Me arrebataron de las manos los lentes de bioseguridad que tenía y a empujones nos sacaron. Un hombre me sujetó del brazo y me dijo: ‘vamos porque les pueden hacer cualquier cosa’ y nos fuimos al vehículo”.
Lejos de calmarse, agregó Rojas, empezaron a tirar piedras y palos. “Mi compañero les decía que no era necesario, que ya nos íbamos, pero de todas formas siguieron”, según la periodista.
La reportera explicó que solo quería informar para los televidentes de su medio. “Solo queríamos informar, dar micrófono a todos por igual; es uno de los principios que más intentamos respetar, pero en estas condiciones es realmente difícil. El ambiente es hostil en toda la zona”, apuntó.
“Hemos vivido momentos muy difíciles, pese a que sabemos que estamos expuestos” a riesgos, dijo sin esconder el temor que sintió al hallarse rodeada de personas violentas.
Una noche antes, los pobladores del lugar encendieron fogatas, bloquearon las calles con escombros y enfrentaron a policías antimotines y militares en actitud de rebeldía contra la cuarentena vigente en Bolivia, desde el pasado 22 de marzo.
Rojas sospecha que el joven amistoso que se les acercó al inicio, ofreciéndoles una entrevista, en realidad preparó un cerco a su alrededor.
“Fue una trampa, porque él estaba con la gente cuando se acercó a nosotros; después él se unió al grupo de personas que nos gritaban; en realidad no tenían intención de hablar”, comentó.
Golpearon con palos y piedras al motorizado del medio, causando abolladuras, señaló el jefe de Prensa de la Red Uno, Diego Viamont. Rojas identificó a las personas violentas como simpatizantes del partido del expresidente Evo Morales (2006-2019).
“Nos decían que debíamos defender a Evo (Morales) y que solo la radio de los cocaleros, Kawsachun Coca, decía la verdad”, describió.
Durante la mañana del martes, los manifestantes se mostraban agresivos ante los periodistas. El fotógrafo del diario Opinión, Dico Solís, informó que fue el blanco de piedras y palos para amedrentarlo.
El periodista de Radio Illimani, Walter Guarachi Arellano y el enviado del diario Los Tiempos fueron agredidos verbalmente y huyeron de las piedras lanzadas por los manifestantes.
