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Medio: Los Tiempos
Fecha de la publicación: jueves 16 de abril de 2020
Categoría: Conflictos sociales
Subcategoría: Problemas de gobernabilidad
Dirección Web: Visitar Sitio Web
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Aproximadamente 1.500 ciudadanos bolivianos se encuentran en Chile intentando retornar al país porque ya no tienen las condiciones económicas para sostenerse debido a la crisis sanitaria por la COVID-19. Sin embargo, el cierre de fronteras dispuesto por el Gobierno para evitar la expansión del virus ha complicado su situación.
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- La canciller de Bolivia, Karen Longaric. Foto archivo | Cancillería
Publicado el 16/04/2020 a las 16h55
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Aproximadamente 1.500 ciudadanos bolivianos se encuentran en Chile intentando retornar al país porque ya no tienen las condiciones económicas para sostenerse debido a la crisis sanitaria por la COVID-19. Sin embargo, el cierre de fronteras dispuesto por el Gobierno para evitar la expansión del virus ha complicado su situación.
Karen Longaric, canciller de Bolivia, aseguró a Los Tiempos que se está coordinando la atención de los compatriotas con autoridades del vecino país, porque la gestión para el retorno al territorio nacional será “gradual”
“El gran problema del Gobierno de Bolivia es que no tenemos instalaciones adecuadas en la frontera para que los compatriotas hagan la cuarentena, por eso tienen que aguardar un tiempo para que los grupos que ya están esperando su turno para cuarentena en Pisiga concluyan e ingresen los siguientes”, informó Longaric.
Según datos de la Cancillería, en Iquique existen cerca de 1.100 bolivianos, 800 permanecen en cuarentena y 300 en refugios momentáneos organizados por las autoridades chilenas.
“Cancillería va a ayudarlos para que gradualmente vayan ingresando al país luego de cumplir las exigencias que establece el Ministerio de Salud (…) Deben esperar su turno porque el espacio para guardar cuarentena en el territorio boliviano que se ha instalado en Pisiga tiene una capacidad máxima de 480 personas”, recalcó la Ministra.
Bolivianos en Antofagasta deben esperar
Desde hace dos días más de 300 bolivianos llegaron hasta la ciudad chilena de Antofagasta intentando volver al país, agobiados por la crisis económica que golpea a la región debido a la Covid-19.
Los compatriotas están alojados en el Liceo Industrial gracias a la gestión de las autoridades chilenas. Jorge Corpus, un paceño que está en este grupo de espera, lamenta la situación que están atravesando. “No nos alcanza para subsistir, cerraron los fondos, hubo despidos. Decidimos retornar a Bolivia y estar con nuestra familia (...) Sabíamos que las fronteras estaban cerradas pero el objetivo era hacer cuarentena con los otros bolivianos. Todos tenemos derecho de volver”.
Sobre este grupo de bolivianos la canciller Karen Longaric dijo que “se está solicitando la cooperación de Naciones Unidas y de la Organización Internacional para las Migraciones para que puedan darles alimentación mientas se pueda resolver su ingreso al país, previa cuarentena”.
“Si todo va bien este grupo de Antofagasta podría ingresar a Pisiga, donde está el campamento para la cuarentena, en unos 20 días. Hay grupos previos que están en Iquique que van a ingresar primero al campamento”, añadió la autoridad.
Sin embargo, la alcaldesa de Antofagasta, Karen Rojo pidió una inmediata coordinación con las autoridades bolivianas para que se resuelva esta situación que considera como un "un hecho humanitario grave".
"Quisiera que alguna autoridad de Bolivia se comunique con nosotros para que entiendan que esto no puede seguir, no podemos seguir reteniendo a estas personas que están en buena condición de salud, les estamos tomando los controles; pero si ellos no les abren las puertas va a ser difícil esta planificación, es importante la coordinación", dijo Rojo a Radio Bio Bio de Chile.
"Mientras más se demore el Gobierno boliviano hay más probabilidad de que estas personas se enfermen", añadió la alcaldesa de Antofagasta.
Longaric enfatizó en que el Gobierno está pendiente de los compatriotas en la frontera, pero que también se debe priorizar la salud de los más de 11 millones de bolivianos que están en cuarentena en territorio nacional y tienen temor al contagio.