Ya se está haciendo común que políticos de diferentes partes del mundo renuncien a sus cargos cuando se descubren mentiras en sus hojas de vida. El último caso ocurrió en España, donde renunció la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, luego de un mes de resistir el escándalo porque quedó al descubierto que obtuvo su título de máster sin cursar el mismo.

En la mira

El NO-título de Cifuentes

Ya se está haciendo común que políticos de diferentes partes del mundo renuncien a sus cargos cuando se descubren mentiras en sus hojas de vida. El último caso ocurrió en España, donde renunció la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, luego de un mes de resistir el escándalo porque quedó al descubierto que obtuvo su título de máster sin cursar el mismo.

Lo curioso del caso es que su dimisión se produjo luego de que se difundiera un video en el que se la ve robando unas cremas de un supermercado el año 2011. Fue la gota que rebalsó el vaso. 

Ella se defendió hasta el final diciendo que si hubo irregularidades con el máster son atribuibles a quienes se lo otorgaron y sobre las cremas explicó que fue un error que reparó de inmediato pues pagó la cuenta, que eran 40 euros.

El caso es que la opinión pública ya no está dispuesta a aceptar que sus políticos mientan, ni siquiera en sus hojas de vida. Muchos en Bolivia tendrán que poner sus barbas en remojo. Cifuentes era una especie de estrella de la política española  y se perfilaba como posible sucesora de Mariano Rajoy en el PP. Ya no más.