La decisión de las organizaciones de la sociedad civil nació tras la crisis institucional que vivió el país, como consecuencia de las elecciones del 20 de octubre de 2019, calificadas como fraudulentas por la Organización de Estados Americanos (OEA) y como “completamente irregulares” por la Unión Europea, afirmaron.

En el marco de la institucionalidad electoral, se pretende monitorear las normas y procedimientos a partir de la convocatoria a elecciones realizada por el nuevo TSE, hasta el cierre del proceso electoral, es decir, hasta la publicación de resultados finales, tal como está establecido en la Ley de Régimen Electoral (026).

El monitoreo estará basado en las recomendaciones que dejaron la OEA y la UE, luego del pasado proceso electoral y se enfocará en las actividades previas y las contenidas en el calendario electoral. 

“Realizar monitoreo al TSE y a los TED se constituye en una contribución al sistema democrático y a la transparencia del proceso electoral. La iniciativa ciudadana no partidaria considera que una buena gestión del Tribunal Supremo Electoral resulta de la adecuada combinación de buenas prácticas bajo estándares de “legalidad, imparcialidad e independencia, eficiencia, transparencia y equidad””, dice un comunicado de la coalición de organizaciones denominada La Ruta de la Democracia.

Esto incluye el marco legal que normará el proceso, como la inhabilitación de candidatos, campañas electorales, mejoramiento del padrón electoral biométrico, elaboración del material electoral, acciones de capacitación a funcionarios electorales, información y orientación a los votantes, actuación de los medios de comunicación, votación, recuento de votos, seguimiento de los contenciosos electorales y el anuncio de los resultados. 

La Ruta de la Democracia compuesta por varias organizaciones e instituciones -entre ellas, la Universidad Mayor de San Andrés y la Fundación Jubileo- junto a otras organizaciones civiles, destacan que asumen un rol fundamental para mejorar los índices de transparencia y confiabilidad de las instituciones democráticas, como el TSE, que en los últimos años ha sufrido la ausencia de institucionalidad y credibilidad. 

La iniciativa del Estudio de Integridad Electoral ha planteado tres tipos de observación, a través del seguimiento a la difusión de noticias en medios de comunicación (nacional y local), mediante el intercambio de información directa con el Tribunal Supremo Electoral y los Tribunales Electorales Departamentales, y de la observación ciudadana no partidaria el día de la elección, con la participación de más de 100 observadores desplazados por todo el país. 

La Ruta de la Democracia, la Fundación Jubileo y la Carrera de Ciencias Políticas de la UMSA presentarán, este miércoles, la iniciativa ciudadana no partidaria “Estudio de Integridad Electoral”, para realizar un monitoreo a las actividades del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y Tribunales Electorales Departamentales (TED) respecto el cumplimiento de la normativa y el calendario de cara a las Elecciones Generales del 3 de mayo de este año.