Medio: Los Tiempos
Fecha de la publicación: miércoles 15 de enero de 2020
Categoría: Conflictos sociales
Subcategoría: Problemas de gobernabilidad
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El abogado y militar en servicio pasivo Jorge Santisteban aseveró que es preocupante el llamado de Morales a crear milicias y explicó que este tipo de organizaciones forman parte de un plan regional junto a Venezuela, Nicaragua y Cuba, para controlar países de la región.
Incluso —recordó— hay información de que muchos civiles ya fueron entrenados en años anteriores en cuarteles, para conformar milicias.
Dijo que en el caso de grupos de la sociedad civil, como la Resistencia, no son comparables con milicias porque tienen otros fines. Las milicias, explicó, buscan tomar el poder, tienen un fin económico y una estructura.
En el caso de los grupos civiles, éstos no buscan el poder.
Sin embargo, grupos como la autodenominada Resistencia Civil coordinan hoy sus acciones con el Ejecutivo transitorio y han sido vistos en una diversidad de actos haciendo de seguridad o controlando accesos, una labor que corresponde por ley a la Policía.
Por ello, “se debe evitar que las organizaciones nuevamente incurran en estos actos porque esas son funciones del Estado, por eso es que el Estado no debe ir detrás de los acontecimientos, porque la sociedad civil organizada está actuando por su cuenta”, dijo Santisteban.
Y continuó: “Entonces, si estos grupos, tanto de un lado como de otro, crecen y Evo Morales persiste en su afán insurreccional con milicias armadas, esto puede degenerar en una convulsión nacional y terminar en una guerra civil, porque van creciendo de ambos lados. La sociedad civil no creo que permita esas milicias, entonces puede haber un enfrentamiento que va a enlutar a las familias bolivianas”, aseveró.
Estos grupos fueron criticados desde diversos frentes. En su informe preliminar, tras su visita a Bolivia, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) mencionó la existencia de “grupos armados” particulares y recomendó que estos sean desmantelados “sean del bando que sean”.
El grupo la Resistencia, que en principio tenía presencia en Cochabamba, creó filiales en Tarija, Oruro, Potosí, Pando y Chuquisaca, conformando la Resistencia Civil Boliviana. Ante la convocatoria del MAS a protestas contra la ampliación del mandato de Jeanine Áñez más allá del 22 de enero, el dirigente de la Resistencia, Yassir Molina, advirtió en Tarija que no permitirán “actos de sedición ni terrorismo” y aseguró que “no somos personas conflictivas; somos un grupo de reacción. Ante la amenaza recibida vamos a actuar de manera pertinente”.
6 filiales de la Resistencia. El grupo autodenominado Resistencia Civil Boliviana tiene presencia en al menos seis ciudades del país.
PIDEN EN ARGENTINA RETIRAR REFUGIO A EVO
Miembros del partido Unión Cívica Radical (UCR) de Argentina gestionan ante el Congreso de ese país una solicitud para que se retire el estatus de refugiado político al expresidente Evo Morales y expulsarlo del país tras haber declarado que se deben establecer milicias armadas en Bolivia.
La Cancillería boliviana también emitió un comunicado pidiendo al canciller argentino, Felipe Sola, que su país “repudie las prácticas de Evo Morales”, quien, amparado en la figura del refugio, “incita a la violencia, el odio, la discriminación, la subversión y el terrorismo”.
MURILLO: CUALQUIER FOCO SUBVERSIVO SERÁ APAGADO
REDACCIÓN CENTRAL
El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, aseguró hoy que encarcelará a todas las personas que incurran en actos subversivos, tras el llamado de Evo Morales a armar milicias.
“No vamos a permitir ningún foco subversivo en Bolivia, todo foco subversivo lo voy a apagar encarcelando a todo subversivo que haya porque eso me autoriza la ley”, dijo.
Recomendó a “terroristas, narcotraficantes y sediciosos” abandonar el país.
Respecto a los grupos como la Resistencia Civil Boliviana, que en La Paz cercó la vivienda del exministro Carlos Romero y también lo siguieron al hospital, Murillo dijo que estas protestas forman parte de la libertad de expresión.
El llamado de Morales a tomar armas vulneró varias normas: la Ley Orgánica de las FFAA, la Ley Orgánica de la Policía, el Código Penal y al menos cinco artículos de la Constitución.