“No podemos nosotros dejar de lado los acuerdos que firmaron el gobierno de transición con estas organizaciones sociales, movilizadas en estas fechas (luego de la renuncia del expresidente Evo Morales). (...) Hermanas y hermanos entendamos, seamos tolerantes, no podemos permitir que el país nuevamente entre a un conflicto”, aseveró.

Ayer, el plan normativo fue aprobado en el Senado por los dos tercios del Movimiento al Socialismo (MAS). Las bancadas de Unidad Demócrata (UD) y el Partido Demócrata Cristiano (PDC) abandonaron la sesión y de denunciaron que este precepto servirá para dar impunidad a exautoridades y dirigentes que incurrieron en delitos, tras la renuncia de Morales.

Copa indicó que con esta norma se pretende dar garantías a las organizaciones para que puedan llevar adelante sus asambleas y ampliados con miras a los comicios nacionales.  “Todos queremos ir en paz a las elecciones venideras del 3 de mayo y tener las mismas condiciones para poder participar”, enfatizó.

Al darse a conocer la dimisión del exmandatario, grupos radicales de afines al MAS comenzar a generar convulsión en las ciudades, quemaron más de 60 buses Pumakatari, estaciones policiales, la casa de la periodista Casimira Lema y de dirigentes cívicos y sociales. Además cercaron las ciudades para dejar sin alimentos a la población y trataron de hacer estallar la planta de Senkata.