“En democracia no debe haber abuso de poder”

Maldonado pide honrar el dictamen de Naciones Unidas para no poner en duda la credibilidad del Estado.

Beatriz Layme  / La Paz

El exsenador del MAS Eduardo Maldonado afirmó que el  dictamen del Comité de Derechos Humanos de la   Organización de Naciones Unidas (ONU) es “una llamada de atención” al Gobierno,  para que entienda que “en democracia no se puede admitir el ejercicio discrecional del poder ni abuso de poder”.

Ahora -afirmó-, el Estado boliviano debe honrar la determinación de la ONU y con ello “comprometer la fe y credibilidad” de las entidades estatales ante todas las instancias del derecho internacional.

   Maldonado dijo que urge que el Estado cumpla con el fallo   porque Bolivia sigue un proceso ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por una salida soberana al mar,  con el argumento de que Chile incumplió sus compromisos.

“Entonces, Bolivia tiene que ser coherente en el plano internacional, tiene que dar una señal inequívoca de respeto a las instancias del derecho internacional. No podemos tener una actitud que ponga en entredicho la fe y credibilidad del Estado”, aseguró Maldonado a Página Siete.

Advirtió que una señal contradictoria ante la comunidad internacional será contraproducente.

“Respetemos en todas sus instancias del derecho internacional, las instancias de justicia o en su caso se ponen en entredicho la fe y credibilidad del Estado boliviano”, sostuvo.

 Maldonado también lamentó que las autoridades hayan asumido una posición “malévola” contra la imagen del país,  con el único fin de impedir su candidatura en los comicios de 2015. 

 Afirmó que a la fecha se pregunta cuál fue su error para que las autoridades electorales de entonces hayan decidido vulnerar sus derechos políticos que están garantizados por la Constitución Política del Estado.   

“Será por instalar una huelga de hambre  en los 19 días del conflicto de Potosí, será  por haber exigido que se apruebe la Ley de  lucha contra el racismo y discriminación en consenso con todas las organizaciones de la prensa”, dijo Maldonado, quien recordó que durante el tratamiento de la ley contra el racismo, el MAS lo excluyó y destituyó -antes de que concluya su mandato- del cargo de presidente de la Comisión de Constitución de la Cámara de Senadores.

Consideró  que “su delito” también fue denunciar la flagrante violación de derechos humanos   por la represión a indígenas del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) en Chaparina y por  alertar los riesgos “de que incluso iba a correr sangre” si se aprobaba la Ley Minera, tal como envió el Ejecutivo.

En ese marco, el exlegislador manifestó que las denuncias que formuló fueron por su convicción de defensa de los derechos humanos, por los recursos naturales y por su departamento, Potosí.

“No fui militante del MAS,  sino invitado como candidato a senador, y de inicio señalé que sería consecuente en la defensa de los derechos humanos, a mi departamento, por el cual fui elegido como senador. Violaron mis derechos y ahora el Estado,  el Gobierno debe honrar el dictamen de la ONU, que es una llamada de atención al Gobierno”, manifestó.