Mientras crecía la tensión y la presión política, ministros, viceministros, gobernadores, alcaldes y asambleístas nacionales dimitieron, varios por la seguridad de sus familias. Muchas autoridades del departamento de Potosí en particular prefirieron dar un paso al costado.

El sábado, en Oruro, los manifestantes reaccionaron con violencia, porque en el sector de Vila Vila en la carretera a La Paz, los buses con delegaciones de Chuquisaca y Potosí fueron apedreados y agredidos violentamente.

Un grupo de personas se trasladó al domicilio del gobernador Víctor Hugo Vásquez y encendió fuego a la vivienda que terminó en cenizas, lo responsabilizaron por los ataques a los buses. En esa ciudad, también destrozaron la casa de la hermana de Evo Morales, Esther Morales.

En Potosí, la situación fue más crítica. Quemaron la casa de Víctor Borda, y tomaron como rehén a su hermano, lo que provocó la renuncia a su curul y al cargo de Presidente de la Cámara de Diputados, .

El bien inmueble de César Navarro corrió el mismo destino, lo que le obligó a alejarse del Gobierno en el cargo de ministro de Minería, ante el temor de que se asuman represalias contra sus familiares.

Morales renunció a la presidencia y Álvaro García Linera a la vicepresidencia, ayer en la tarde, y sucesivamente otras autoridades abandonaron el Gobierno de manera escrita, manifestaciones a través de los medios de comunicación o de las redes sociales.

IVÁN CANELAS

Poco antes de las 14:30 horas de ayer, Iván Canelas renunció al cargo de Gobernador de Cochabamba.

Canelas desapareció del escenario público en lasúltimas semanas. Solo se conocieron comunicados oficiales escritos que difundía la unidad de Comunicación del Gobierno departamental cochabambino.

En su carta de renuncia expresó que se deben tomar decisiones dejando a un lado los intereses personales y políticos.

“Por eso, aunque el problema de manera directa no tendría que afectar a gobernaciones y municipios, asumí la determinación de renunciar en mi condición de Gobernador, a ver si de esa manera, al menos con un granito de arena, coadyuvó a devolverle la paz a nuestra región”, escribió.

Argumentó que se debía esperar el informe de auditoría de las elecciones de la Organización de Estados Americanos (OEA).

“Y no nos equivocamos, hoy sabemos que hubo irregularidades en el conteo del voto, y eso como a muchos de los bolivianos nos llena de indignación y decepción”.