Medio: Página Siete
Fecha de la publicación: domingo 17 de noviembre de 2019
Categoría: Institucional
Subcategoría: Tribunal Supremo Electoral (TSE)
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“En estos días y horas hemos estado activos a través de nuestra
Delegación en La Paz —a la cual quiero agradecer— para crear un espacio
en el que el Gobierno, la oposición y la sociedad civil logren encontrar
una salida a esta situación”, afirmó la representante durante su
discurso en la sesión plenaria del Parlamento Europeo sobre la situación
en Bolivia.
Mogherini anunció también que el lunes conversó con los ministros de Relaciones Exteriores europeos sobre el trabajo de ese bloque en el país e intercambiaron ideas sobre la mejor manera de apoyar a Bolivia en la preparación de nuevas elecciones generales.
En ese sentido, expresó que se evalúa la posibilidad de mandar una nueva misión de la Unión y acompañar la designación de un nuevo Tribunal Supremo Electoral (TSE).
El 10 de noviembre, el equipo de la OEA enviado a Bolivia para realizar la auditoría de la votación de los comicios dio a conocer su informe preliminar en el que estableció que en los cuatro elementos revisados (tecnología, cadena de custodia, integridad de las actas y proyecciones estadísticas) se hallaron “irregularidades” que varían desde muy graves hasta indicativas.
Ante esto, la misión cuestionó los resultados del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que dieron la victoria a Evo Morales en primera vuelta, con el 47,08% de los votos, y afirmó que no los puede validar, por lo que recomendó convocar a nuevas elecciones.
Dicho informe se dio a conocer durante los 19 días de paro cívico en rechazo a las denuncias de fraude electoral y en defensa del voto. A consecuencia de las medidas de protesta se registraron enfrentamientos entre los que atacaban la medida y seguidores del MAS, que provocaron la muerte de varios bolivianos y decenas de heridos.
Las protestas y el motín policial desembocaron en la renuncia del presidente Morales y que la senadora opositora Jeanine Añez suma la Presidencia aplicando la “sucesión constitucional”. En ese sentido, Mogherini sostuvo que la Unión Europea apoya una solución institucional que permita conformar un liderazgo interino para preparar nuevas elecciones y se evite un vacío de poder que podría tener consecuencias nefastas para todo el país.
La representante afirmó además que se está apoyado activamente la mediación impulsada por la Iglesia Católica para consensuar un camino pacífico hacia nuevos comicios.
“Esta mediación ya ha producido algunos primeros resultados, que calman parcialmente las tensiones y evitan una peor escalada de la violencia”, aseguró Mogherini.
La ejecutiva afirmó que Bolivia es un socio muy importante de la Unión Europea y en estos años se ha construido una cooperación política sólida y se ha desarrollado diálogos políticos en los que se trataron todos los temas, incluyendo aquellos en lo que tenemos desacuerdos o diferentes puntos de vista.
Recordó que envió una misión de expertos electorales a Bolivia y se tienen varios proyectos de apoyo a la sociedad civil en Bolivia.
Mogherini mencionó que en los últimos 14 años Bolivia ha mejorado para bien, la pobreza ha disminuido, el acceso a los servicios básicos ha mejorado y la inclusión de los pueblos indígenas en la vida pública del país ha ido en aumento.
“Todos estos avances tienen que ser mantenidos y esto sólo será posible a través de una solución política pacífica que respete la Constitución y el Estado de Derecho y que pueda llevar al país a nuevas elecciones oportunas y creíbles que reflejen fielmente la voluntad el pueblo boliviano”, aseguró la representante.
Manifestó que la Unión Europea continuará al lado del pueblo boliviano como lo ha hecho estos años y especialmente en estos difíciles momentos de la vida democrática del país.