El líder social Juan Grabois detalló que la delegación estará compuesta por, entre otros, dirigentes sociales, abogados, políticos, defensores de los derechos humanos, académicos y estudiantes, que responden a un pedido directo de referentes sociales bolivianos.

"Recibimos el pedido desesperado de dirigentes sociales y comunitarios, algunos partidarios del Gobierno que fue derrocado por el golpe de Estado que se produjo en Bolivia, y otros que no lo son, por las múltiples violaciones a los derechos humanos", destacó.

Además, agregó que recibieron una invitación de la Defensoría del Pueblo boliviana, la "única institución democrática que se está sosteniendo" en el país, para realizar una labor que, aseguran, les ha sido negada a diversas instituciones internacionales. 

"Grupos parapoliciales han impedido el normal desempeño de las funciones de algunas instituciones internacionales que están allí para hacer precisamente algo que nosotros queremos intentar hacer, que es tomar contacto directo con las víctimas", agregó.

Confirmó que ya tienen pautada una reunión con víctimas y familiares en una iglesia, cuya ubicación exacta no quiso desvelar por motivos de seguridad, con el espíritu de "visibilizar lo que hoy no se está pudiendo visibilizar" y elaborar un informe con las observaciones y testimonios que reciban.

Asimismo elaborarán un mecanismo que les permita recoger denuncias que presentarán ante las "distintas instancias internacionales para que puedan ser tutelados los derechos que están siendo violados en Bolivia". 

Grabois no dudó en calificar de golpe de Estado lo sucedido en Bolivia, donde rige un Gobierno transitorio desde la salida del país de Evo Morales mientras en la calles se mantienen las batallas entre oficialistas y opositores desde las elecciones del pasado 20 de octubre, unos comicios que según la oposición y la Organización de Estados Americanos sufrieron irregularidades en el recuento de votos.

"Bolivia en este momento está bajo un Gobierno de facto, bajo una dictadura cívico militar. (...) A poquitos kilómetros estamos sufriendo una situación que irrumpe ese consenso que existe en el Cono Sur, que la forma de llegar al poder no puede ser a través de las armas", valoró.

Según los datos que aportaron las organizaciones argentinas, en Bolivia "32 personas fueron asesinadas en protestas sociales, centenares fueron heridos y las detenciones arbitrarias y desapariciones forzadas se cuentan por millares".