Medio: Página Siete
Fecha de la publicación: lunes 25 de noviembre de 2019
Categoría: Institucional
Subcategoría: Tribunal Supremo Electoral (TSE)
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“Asumo la responsabilidad consciente del crucial y complejo momento histórico que vive el país”, fueron sus primeras palabras. “Se requiere reencontrar la misión auténtica del Tribunal Electoral como una institución independiente del Poder Ejecutivo...”, dijo también.
Durante su discurso de presentación, en el Palacio de Gobierno, en varias oportunidades remarcó la necesidad de que el Órgano Electoral Plurinacional (OEP) conserve “la imparcialidad frente a los poderes del Estado y las organizaciones políticas”.
Según Romero Ballivián, a la larga, “la independencia con respecto a todos los actores representa una verdadera victoria colectiva”.
En referencia a los próximos comicios de 2020, reflexionó en sentido de que por primera vez en más de cuatro décadas se anuló una elección, dejando una “sociedad herida y dividida”.
Sin embargo, rescató de este penoso trance que los actores políticos, las instituciones y las fuerzas vivas “hemos reafirmado nuestra convicción democrática... privilegiamos la construcción de acuerdos y de consensos”.
Admitió que para las nuevas elecciones se presentan desafíos técnicos en plazos cortos. Por ello, pidió el apoyo de la sociedad y de los organismos internacionales para que el TSE pueda cumplirlos.
Posteriormente, en declaraciones a los medios, adelantó que “vamos a trabajar con seriedad en el saneamiento del padrón” electoral.
Por último, recalcó que se trabajará en “recuperar la confianza de la ciudadanía” con un OEP que sea “imparcial y equidistante respecto a los poderes del Estado y las organizaciones políticas”.
RESUMEN DE HOJA DE VIDA
Respetado profesional que venía siendo sugerido por distintos sectores de la sociedad, Romero Ballivián es hijo del fallecido Salvador Romero Pittari, sociólogo, ensayista, catedrático universitario, ministro y diplomático boliviano.
Es abogado de profesión y se desempeñó recientemente como cooperante de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y la Organización de Naciones Unidas (ONU). Tiene un doctorado del Instituto de Estudios Políticos de París.
También fue director del Instituto Nacional Demócrata en Honduras y del Centro de Asesoría y Promoción Electoral en el Instituto Interamericano de Derechos Humanos.
Es autor de varios libros. Sus numerosas publicaciones, entre ellas artículos en revistas especializadas, circulan en países de América y Europa.