Medio: ERBOL
Fecha de la publicación: martes 10 de abril de 2018
Categoría: Debate sobre las democracias
Subcategoría: Repostulación presidencial / 21F
Dirección Web: Visitar Sitio Web
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El ministro de Justicia Héctor Arce salió en conferencia de prensa en Palacio de Gobierno para asegurar que la OEA tiene sus propias instituciones como la Comisión Interamericana de Desarrollo Humanos y la Corte Interamericana de Derechos Humanos que “son las únicas que se encuentran facultadas para interpretar y aplicar los propios artículos del Pacto de San José de Costa Rica”.
Sostuvo que los mecanismos están previstos en ambos casos y en la Carta de la OEA donde Luis Almagro es un funcionario de la OEA que no habla por las instituciones que las únicas facultadas para la interpretación, siguiendo procedimientos, pasos y requisitos que no se han cumplido en ningún sentido.
Recordó que adicionalmente Almagro, en octubre del año pasado, ha realizado una consulta a una instancia foránea como es la Comisión de Venecia, que no es un órgano formal de la OEA, sino una comisión de abogados fundada en 1990 con un objetivo sano pero que se ha diluido y actúa con fines políticos que no son vinculantes para ningún estado, y ninguna institución al interior de ningún país.
Arce indicó que la Comisión de Venecia no tiene relación con la OEA y el señor Almagro, desconociendo las propias instituciones de la Organización, acude a un organismo que no responde a nadie, que no tiene fallos ni opiniones vinculantes para nadie, “para forzar sus intenciones erróneas, mezquinas y sectarias”.
Dijo que la actitud de Almagro viola el artículo 3 inc. e) de la Carta de la OEA que señala que todo Estado tiene derecho a elegir, sin injerencias externas, su sistema político, económico y social y tiene el deber de no intervenir en los asuntos de otro Estado.
“El señor Almagro sin ningún respaldo institucional de la OEA viola este principio fundamental, interfiere con la organización institucional y jurídica de varios estados, opina sobre sus procedimientos constitucionales, versa y da opiniones sobre los mecanismos que tiene para desarrollar su democracia en absoluta libertad y en ejercicio de toda su soberanía, por lo tanto, esa actitud exprofesa, inentendible del secretario general, es absolutamente reprochable, no está de acuerdo con los estatutos del funcionamiento de la OEA y viola propia carta de la OEA”, afirmó.