El conflicto surgió por el conflicto entre comunarios y la empresa Comabol, de capitales chinos. a la cual acusan de intentar ingresar a su territorio por la fuerza y con amedrentamiento.

Los comunarios ya estaban declarados en estado de emergencia, puesto que a finales de febrero el conflicto derivó en un operativo policial con allanamientos.

La Defensoría del Pueblo intervino en este caso y se logró que se convoque a una reunión para solucionar el conflicto, junto con autoridades del sector como el Ministerio de Minería y la AJAM.

La reunión se realizó en medio del Cabildo en la comunidad de Totoroco en la provincia Inquisivi. En el mismo los habitantes determinaron la expulsión de las empresas chinas.

“Los chinos tienen que retirarse, los extranjeros, de nuestro territorio. No tienen pisada. Eso vamos a hacer prevalecer”, dijo un comunario presente en el encuentro.