Cossío, que está refugiado hace ocho años en Asunción (Paraguay), fue sentenciado a seis años de cárcel por el delito de enriquecimiento ilícito debido a que sus ingresos no coinciden con los bienes adquiridos, según informó Tarija Economía.

Según la ex autoridad que habló mediante una teleconferencia, la dictadura de Evo Morales no descansó en su propósito de eliminarlo políticamente con el odio y en base a las mentiras en su contra.

"Desde la justicia ordinaria se armó de manera canallesca el juicio por enriquecimiento ilícito, incluyendo a mi madre e hijas, para destruir mi reputación. En 14 años como servidor público no me he enriquecido y más bien me empobrecí porque me dedique a servir a la sociedad", dijo Cossío.

Los bienes obtenidos, como el terreno, su casa, tres autos usados, fueron adjudicados antes de que ingrese a la vida política y no cuando tuvo la oportunidad de ejercer cargos públicos, entre 1996 y 2010.

Sin embargo, la Fiscalía de Distrito que imputó a la exautoridad considera que adquirió al menos 24 bienes y cinco vehículos a lo largo de ese período, pero trató de ocultar con la transferencia a sus familiares.

El ex gobernador prevé apelar la sentencia dictada por la justicia ordinaria en Tarija y de acudir a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA por haber vulnerado sus derechos y por dictar los 6 años de cárcel en indefensión cuando él es un refugiado político.