Medio: Nuevo Sur
Fecha de la publicación: martes 17 de septiembre de 2019
Categoría: Conflictos sociales
Subcategoría: Problemas de gobernabilidad
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De las agresiones verbales empezaron a pasar a los golpes, mientras los pastpresidentes no dejan el adjetivo “traidores”, los aludidos minimizan el tema.
Fernando Barral Zegarra
La reunión del viernes entre el directorio cívico actual y el Mandatario del país y Presidente nacional del MAS, Evo Morales Ayma, sigue repercutiendo, algunos cívicos llegaron a las agresiones y los Pastpresidentes exigen convocar de urgencia a Asamblea de instituciones.
La Pastpresidenta Patricia Galarza Alé dio un empujón y golpe en la cara al cívico, Wilfredo Vidal Ortega en el pasillo de la casa cívica, mientras en el frontis, activistas afines a los expresidentes iniciaron campaña de ayuda para apagar el incendio en Sama.
Los expresidentes entregaron al directorio actual un Manifiesto Cívico Ciudadano cuyo primer punto exige convocar de manera inmediata a Asamblea Extraordinaria de la Tarijeñidad para que el presidente junto a su directorio, presenten informe de la reunión con Morales.
Este informe debe ser escrito y oral. “Solicitamos al Movimiento Cívico Boliviano convocar a Reunión Nacional, para tratar este tema y las acciones de defensa del 21-F”, añade un segundo punto del documento difundido este lunes por la mañana.
“Exigimos a cada uno de los miembros del Directorio, manifestar de manera escrita su decisión o no de llevar adelante la reunión objetada. Exigimos se nos facilite de manera inmediata el Acta y Resolución de Directorio que respalde esta decisión”, prosigue el documento.
Los expresidentes y quienes los secundan reafirmaron el estado de permanente vigilia del accionar cívico, firmaron Juan Carlos Ramos, Patricia Galarza, Walter Mogro, Jorge Lema, entre otras personas, representantes de diferentes instituciones.
El Manifiesto en la parte considerativa el Manifiesto indica que actúan en el marco del Estatuto cívico, califican la reunión con Morales de arbitraria e inoportuna porque el Mandatario “le dio la espalda a Tarija durante más de 13 años de gobierno”.
“Pisoteó la autonomía, puso en la gobernación al interventor Lino Condori, sofoca económicamente al gobierno departamental, no respeta la Reserva de Tariquía, jamás quiso conciliar cuentas con Tarija, se niega hacerse cargo de la red vial fundamental”.
“Quiere seguir sangrando económicamente a Tarija, fragmentó la unidad departamental y sobretodo pisotea el voto del 60% de los tarijeños que dijimos ‘No’ a la modificación de la Constitución y hoy el Comité se sienta a negociar con el candidato ilegal e ilegítimo”,
“A decir del presidente Morales ‘lo pasado pisado, quiere borrón y cuenta nueva, quiere que olvidemos los que nos hace, los tarijeños tenemos dignidad”, añade el documento al criticar al directorio por dividir al movimiento cívico nacional.
Dávila minimizó crítica y negó traición a Tarija
El presidente cívico, Carlos Dávila Choque, minimizó los cuestionamientos a su directorio por reunirse con el Mandatario Evo Morales, y dijo que por dos o tres personas no estén de acuerdo y que además están agrediendo, no va seguir haciendo gestión.
Al negar que esté traicionando a Tarija dijo que su gestión busca resultados, ya empezaron a llegar personeros de gobierno para reunirse con autoridades, prevén la llegada de Ministros para ver diferentes problemas del departamento como salud y energía.
Consultado si irán al paro nacional contra la postulación de Morales, por ilegal, el 10 de octubre, respondió que llamará a asamblea de instituciones para que se pronuncien si asumen el paro. Pese a ser decisión nacional, dijo que las instituciones deben pronunciarse.
“Nosotros podemos decir vamos al paro, pero son las instituciones, las provincias que deben decidir”. Preguntado si siguen considerando inconstitucional la postulación de Morales y García, contestó que la posición expresada en la reunión nacional fue clara.
Interrogado si continúan pidiendo la renuncia de los miembros del Tribunal Supremo Electoral (TSE) por considerarlos parcializados con el MAS, respondió que exigen que se respete los resultados del referendo del 21 de febrero de 2016.