Tras la detención domiciliaria de su principal aliado y alcalde de La Paz, Luis Revilla, el candidato opositor Carlos Mesa tachó a jueces y fiscales como “paramilitares de la justicia” porque no solamente es el burgomaestre perseguido sino otros miembros de la dirección nacional de Comunidad Ciudadana.

Mesa se reunió el viernes con los dirigentes de la alianza que lo sustenta, para ratificar que enfrentarán los procesos que les fueron abiertos en medio de la actual campaña electoral.

Leal a su estilo de no aparecer ante los periodistas en circunstancias como esta sino enviar mensajes a través de las redes sociales, Mesa dijo que se reunió con la dirección nacional para decir “falta uno de nosotros, Luis Revilla”.

Sostuvo que la detención domiciliaria muestra “la persecución jurídica y el uso arbitrario de la justicia. Jueces, fiscales transformados como en el tiempo de la dictadura, en paramilitares de la justicia para acusarnos”.

Acompañado de sus dirigentes formados en hilera, explicó que no solamente falta Lucho, sino que también está el Gobernador de Tarija Adrián Oliva que tiene imputación por varios juicios; Ximena Valdivia acusada de manera arbitraria y su propio caso con varios procesos pendientes.

Mesa fue sobreseído del caso Quiborax por el presidente Evo Morales días antes del fallo final de la Corte de La Haya donde Bolivia perdió en su intento de obligar a Chile a una negociación marítima.

Luego fue incorporado a una lista de testigos por el caso de la privatización y capitalización, cuando él era un empresario-periodista de PAT y no ocupaba cargo público alguno. Posteriormente fue mencionado por el caso de los aportes a las cuentas de PAT aunque el fiscal de La Paz, Williams Alave descartó citarlo.