Medio: Nuevo Sur
Fecha de la publicación: jueves 01 de agosto de 2019
Categoría: Legislación electoral
Subcategoría: Leyes nacionales y decretos reglamentarios
Dirección Web: Visitar Sitio Web
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La Ley Electoral que ya está aprobada en un gran porcentaje y que “solamente faltan tres artículos”, como algunos trataron de simplificar el asunto, tiene una singular importancia para este departamento, específicamente dos de esos artículos que son, podríamos decir, la base democrática de esta región. Este instrumento legal incluso tendría que aclarar y con precisión, cuál el relacionamiento de cinco provincias con la región del Gran Chaco.
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Ninanina
La Ley Electoral que ya está aprobada en un gran porcentaje y que “solamente faltan tres artículos”, como algunos trataron de simplificar el asunto, tiene una singular importancia para este departamento, específicamente dos de esos artículos que son, podríamos decir, la base democrática de esta región. Este instrumento legal incluso tendría que aclarar y con precisión, cuál el relacionamiento de cinco provincias con la región del Gran Chaco. No puede ser que esa región tenga representantes en la Asamblea y este ente no tenga tuición o competencia en dicha región. Es un asunto que debe aclararse.
Con relación a la distribución de curules por población es necesario redistribuir de la manera más técnica posible, como dice la legislación, en base al último Censo Nacional de Población y Vivienda, esta redistribución no puede ser arbitraria ni responder al capricho de determinado sector o región. Cercado es la provincia con mayor población en el departamento, en consecuencia tendrá que respetarse ese factor. Precisamente para balancear o equilibrar esto, es que hay asambleístas por territorio, dos por provincia y tres de los pueblos indígenas, tapiete, weenhayek y guaranís.
Otro hecho, es aquello que algunos indican de que el diseño institucional en Tarija está mal, porque, “dónde se ha visto que el candidato ganador tenga minoría en la Asamblea y el perdedor mayoría”. Esto empezó a darse desde finales de la década de los años 2000, para prolongarse hasta ahora con las consecuencias que toda la población está viviendo en carne propia, politización extrema y a la mala, incertidumbre sobre los ingresos, falta de circulante, carencia de empleo, etc. etc. etc. Es necesario corregir esto y hacer que la democracia tarijeña se sustente en mayorías y minorías en directa relación al número de votos que obtuvieron unos y otros. No obrar así, querrá decir que algunos son demócratas, solamente de boca para afuera.
Para muchos, la Asamblea legislativa departamental, que nació como una aspiración de democracia autonómica, en lugar de contribuir al proceso democrático y la profundización de la verdadera autonomía, sirvió para todo lo contrario, baste recordar la inconstitucional suspensión del primer gobernador electo de Tarija.