Medio: Los Tiempos
Fecha de la publicación: sábado 03 de marzo de 2018
Categoría: Conflictos sociales
Subcategoría: Problemas de gobernabilidad
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¿Cuál la situación de los derechos humanos en Bolivia?
Lo veo con una enorme preocupación, y no sólo por la división, por ejemplo, que hay en la Asamblea con dirigentes a nivel nacional, sino es mucho más profundo. Hay violaciones de derechos humanos incluso con muerte en estos 10 años. Eso para nosotros es preocupante, en un momento que hemos luchado por ayudar a este proceso e, incluso, hemos llorado con el Presidente por las violaciones de los derechos.
Para mí, un pueblo que no tiene la libertad, una justicia libre, libertad de expresión, que está todo comprado, es una violación a derechos individuales.
¿Cree que la calidad de los derechos cayó estos años?
Enormemente. Cuando llegué aquí, había tres poderes; del Estado, Iglesia y la prensa. Hoy el Gobierno se mete —sin conocer— con la Iglesia y la libertad de expresión. En uno de los momentos más duros de la dictadura (en 1980) se decía que era un delito ser periodista. Recuerdo el ejemplo de Presencia.
Hoy es difícil. Se ve una situación tan crítica con los medios de comunicación, cuando la historia de este pueblo es el respeto. Duele pasar por canales y saber que no pueden decir lo que quieren.
No soy enemiga de Evo Morales, yo le quiero ayudar, mis denuncias son para ayudar. Hay que reconocer sus obras, pero como defensora de los derechos se debe priorizar, es mejor un hospital de cuarto nivel y no un palacio como se está construyendo en La Paz, destruyendo una parte histórica, una zona que muestra lo republicano de Bolivia.
Me decían los dirigentes socialistas de España, cómo apreciaban su historia (de Evo). Parece que está muy cansado, el cielo y las estrellas eran su casa decía Evo, pero ¿qué le ha pasado?, ¿qué le ha movido el poder? El poder se ejerce dando y no sólo recibiendo.
¿Por qué dice que hay una dictadura de guante blanco?
Me refiero a que algunos amigos me dicen que no se puede hablar de dictadura, pero yo digo que hay una dictadura distinta a la que he conocido, distinta la de Banzer (1971-1977) o García Meza (1981). Yo crecí bajo la dictadura de Franco (en España); en la dictadura de Banzer. Bolivia me enseñó a comprender la dictadura, fue una gran escuela. Sé lo que fueron las ejecuciones.
Lo que quiero decir es que hay una dictadura pero no como antes, no como los de Natusch Busch o Banzer o García Meza, con tanques, no es esa clase; es una dictadura de ideas, de que si no estás conmigo eres enemigo mío. Entonces eso quiero hacer comprender, que es una dictadura distinta, que la llaman con guante blanco, que no es dictadura con “milico” y bota.
Es una dictadura de las ideas, de que el otro si no piensa como yo entonces lo elimino, lo divido y ese poder absoluto quiere dividir a todos. Como los casos de Conamaq, Tipnis o la última de la COB, que me dolió mucho porque yo conocí de cerca a Juan Lechín.
Yo estuve con Lechín cuando fue exiliado, lo ayudé, recuerdo todo, di la vida por ello porque la dictadura te mataba; pero ahora es una dictadura de ideas, que si no piensas como nosotros… Bueno, yo no tengo inconvenientes para decir que el Teleférico es bueno, por ejemplo. Pero también hay derroches, cosas sin terminar. Qué pasa con la salud, con la educación, con el trabajo de las familias bolivianas.
“NOS DUELE QUE SE VULNERE LA CPE”
Carvajal señaló que hay una “dictadura que se llama democrática” tras el fallo de la repostulación indefinida.
“Evo Morales dice que lo que pasó es mentira, que no ganó por la mentira. Pero si pensamos bien ese momento, ese voto, no creo que fue el tema de la señora (Gabriela Zapata), lo que digo es que nos está doliendo en lo más profundo que es esa Constitución que con sus problemas y debilidades, es nuestra”, dijo.
“Qué noble sería que el Presidente acepte eso. Qué nobleza ese corazón para decir ‘bueno, ¿por qué no voy a dejar?, a lo mejor el pueblo luego vuelve a elegirme’”, aseveró.