Medio: Página Siete
Fecha de la publicación: domingo 21 de julio de 2019
Categoría: Representación Política
Subcategoría: Democracia paritaria
Dirección Web: Visitar Sitio Web
Lead
Contenido
Las mujeres son –están siendo– la carta decisiva en esta campaña electoral, en la que todos los partidos se atribuyen la conquista de la equidad.
Liliana Carrillo V. / La Paz
El miércoles 17 de julio, Adriana Salvatierra se convirtió no sólo en la Presidenta más joven del país –empatando en sus mozos 30 con el Mariscal Antonio José de Sucre–, sino también en la segunda mujer en asumir el mandato, después de Lidia Gueiler. Su presidencia también fue una de las más cortas de la historia (duró tres horas, mientras se marchaba el Vice y llegaba el Presi), pero dejó claro que desde las filas azules se busca la promoción en la palestra política de las mujeres y mejor si son jóvenes.
Esta lógica –obligada por la norma– se ha enfatizado en todos los frentes que están en la arena electoral. Hace meses ya, Félix Patzi lanzaba una convocatoria pública para hallar a la candidata vicepresidencial del Tercer Sistema (MTS) y la elegida fue la enfermera chuquisaqueña Lucila Mendieta Pérez.
En el Partido Demócrata Cristiano se presentó como acompañante de Jaime Paz Zamora a la abogada Paola Barriga, aunque finalmente, tras la renuncia del expresidente, todo cambio para el PDC. Sólo Pan-bol postuló de inicio a una candidata a la Presidencia: Ruth Nina.
La Ley 026 de Régimen Electoral, del 30 de junio de 2010, garantiza la democracia intercultural, la equidad de género y la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres. Establece paridad y alternancia en las listas de candidaturas, pero no se aplica para las postulaciones a Presidencia y Vicepresidencia. Y los hechos lo evidencian: desde 1997, en las elecciones generales de Bolivia, sólo ha habido 13 mujeres entre los 80 postulantes a los más altos cargos.
Cuando Comunidad Ciudadana (CC) anunció que serían mujeres todas sus candidatas para las primeras senaturías de los nueve departamentos provocó reacciones. “¿Qué de novedoso tiene que mujeres encabecen listas para senadores? Bolivia es el tercer país en el mundo con mayor participación femenina (52%), la equidad de género se la conquistó en la Constituyente y está en la CPE, Carlos Mesa nuevamente llegó tarde”, tuiteó entonces la presidenta de la Cámara Alta, Adriana Salvatierra, quien figura ahora en la lista de candidatos del MAS.
Bolivia sí tiene 52% de participación femenina, pero ostenta también altos índices de acoso político. Desde 2010, cuando entró en vigencia la Ley 243, hasta julio se registraron 589 denuncias de autoridades femeninas por violencia en el ejercicio de sus cargos. El dato lo reveló la Comisión de Justicia Plural de la Cámara de Diputados.
Como había anunciado, CC presentó a sus candidatas, entre ellas la exmagistrada Silvia Salame, la comunicadora Vania Sandoval, la empresaria Andrea Barrientos y la ambientalista Cecilia Requena. Y el MAS contraatacó con sus propias listas de féminas, que incluye a las exministras Virginia Velasco y Susana Rivero; la joven diputada Valeria Silva y otras. Y también coqueteó con la diseñadora Eliana Paco y con la hija de Remedios Loza, Sayuri.
Esta última, historiadora e influencer, descartó amablemente cualquier candidatura. Pero hay que decir que la “invitación” que se le hizo fue, cuando menos, extraña. El presidente Evo, en una intervención espontánea, comentó que Sayuri no debería apellidar Loza, sino Palenque Loza. “Ese compadre se ha comportado como el cura. En el pueblo todo el mundo dice ‘padre, padre’, menos su hijo; su hijo (dice) ‘tío, tío’”, según se escucha en un audio.
Curiosa manera presidencial de apoyar la promoción de mujeres; curiosa, aunque no nueva. El pasado domingo, sin ir muy lejos, en un acto electoral en Viacha, Evo Morales, recién llegado de viaje, comentó: “Cuando estaba en Rusia he escuchado que tal vez algunos miembros del Tribunal Supremo Electoral (TSE) estarían quitando los derechos de algunas mujeres, he dicho ‘no’, los derechos de las mujeres, la paridad está respetada y vamos a respetar eso”, sostuvo.
Ese día, el Presidente apareció con un gorro ruso y dijo que debido a que las bartolinas no le tejían un gorro tuvo que traerse uno de Moscú. Y a ellas, a las mujeres, les pidió que en adelante le tejan más prendas.
Su opinión, sin embargo, tiene raíces profundas afincadas en un imaginario colectivo que no se libra del machismo y así lo reflejan las altas cifras de feminicidio, de discriminación y acoso. Si en ello no se incide, las leyes seguirán siendo letra muerta.
Las nuevas listas de candidatos y candidatas cumplen la norma de equidad establecidas, y son, para las postulantes, la oportunidad de ejercer un poder real que, sin ser atribución exclusiva de ningún partido, es un derecho conquistado por la sociedad toda.
Con el protagonismo femenino en las listas electorales y la fugaz presidencia de Salvatierra –a lo que se sumó la visita de la princesa japonesa Mako al país–, esta ha sido una semana de mujeres. La primera, ojalá, de muchas.
Las leyes y las mujeres en política
- Ley 026 En Bolivia, las listas de candidaturas deben estar conformadas por el 50% de mujeres y el 50% de hombres, en cumplimiento de criterios de equivalencia, paridad y alternancia, establecidos en la Ley N° 026 del Régimen Electoral.
- Candidatas Desde la aprobación de la nueva CPE en 2009, se desarrollaron dos elecciones generales, en las que 26 ciudadanos postularon a la Presidencia y Vicepresidencia del país. De ese total, sólo cinco fueron mujeres.
- Presidenta Sólo una mujer ocupó el cargo presidencial: Lidia Gueiler Tejada, quien gobernó del 16 de noviembre de 1979 al 17 de julio de 1980. El 17 de julio de 2019, Adriana Salvatierra tuvo el mando por tres horas.