“Es un tema que no lo hemos conversado (la reelección de Almagro) es un tema que no ha tomado todavía una decisión el Estado Plurinacional de Bolivia”, dijo el Ministro de Relaciones Exteriores.

Después de que Almagro respaldó la repostulación del presidente Evo Morales, la oposición sostuvo que el Secretario General había cambiado su posición con el objetivo de tener el voto de Bolivia para ser reelegido.

Almagro, en el exterior, negó que esa haya sido su intención. Por el contrario, dijo que esa posición le podría afectar el apoyo que tienen en la OEA.

El actual Secretario de la OEA se ha caracterizado por sus gestiones en contra del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela. Esas acciones fueron rechazadas en el pasado por el Gobierno boliviano, al punto que incluso el presidente Evo Morales calificó a Almagro de “loco” y “mercenario”, entre 2017 y 2018.

Sin embargo, el espaldarazo de Almagro a la reelección levantó el beneplácito de Morales y sus seguidores, aunque el Secretario General se mantiene en sus esfuerzos contra Nicolás Maduro, aliado del mandatario boliviano.