Medio: Opinión
Fecha de la publicación: viernes 17 de mayo de 2019
Categoría: Conflictos sociales
Subcategoría: Conflictos limítrofes
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Ayer, autoridades municipales, dirigentes de comunidades, parlamentarios y técnicos del Viceministerio de Autonomías se reunieron en la Brigada Parlamentaria y analizaron los casos.
El senador cochabambino y presidente de la Comisión de Constitución Derechos Humanos y Legislación de la Cámara Alta, Ciro Zabala, informó que los municipios que tienen líos de límites son Sacaba, Colomi, Villa Tunari, Tiraque y Tiquipaya.
Explicó que este primer acercamiento sirvió para que los involucrados se informen sobre las normativas relacionadas con los linderos.
También fue un espacio para que den a conocer los problemas que les genera no tener bien definidos los límites.
El legislador señaló que, muchas veces, no se abrieron espacios para que las autoridades de algunos municipios se sienten a conversar y, sin haber dado ese paso importante, simplemente dan por hecho de que no hay voluntad para solucionar los conflictos. En los últimos años, el conflicto limítrofe más fuerte se dio entre Colomi y Villa Tunari. El problema se arrastra desde hace casi 30 años.
Otro que está latente es el de Sacaba con Cercado por Pacata. En reiteradas oportunidades, los vecinos han bloqueado vías y han paralizado actividades.
REFERENDO Zabala manifestó que lo que buscan con las reuniones y el diálogo es evitar que los municipios que tienen dificultades logren acuerdos y no tengan que llegar al referendo. Acotó que cada consulta popular le cuesta al país unos 200 mil bolivianos.
Pero, ahora, considerando que el 20 de octubre se realizarán las elecciones generales, las normas no permiten hacer un referendo en los próximos dos años, por lo que esas poblaciones que tienen líos por los límites tendrían que esperar ese tiempo para definirlos con el voto.
“Consideramos que cuando hay voluntad y conocimiento de las partes involucradas se puede negociar. Debemos ver al referendo como la última vía y no al revés”.
Añadió que para definir un lindero se puede tomar en cuenta varios aspectos como la parte histórica, física, comunitaria y social del territorio en disputa.
“Estamos viendo que los alcaldes y dirigentes tienen predisposición para conversar y encontrar salidas al problema. Solo espero que no se antepongan intereses personales y que se priorice el bien común”.