“Yo no sé cuánto conocerá don Carlos (de) Mesa sobre la administración de justicia; la administración de justicia es y debe ser una forma de desarrollar la actividad estatal totalmente independiente”, indicó.
Dijo que en el pasado, los gobiernos extranjeros intervenían en la administración de justicia e incluso en la elección de sus autoridades.
“La Embajada norteamericana era la que daba el visto bueno para que una persona sea magistrada o ministro de la Corte Suprema de Justicia, como se llamaba antes. En el caso del fiscal general, la propia Embajada tenía sus candidatos, situación que ha terminado”, afirmó.
Recordó que en la etapa neoliberal, los partidos políticos se “loteaban el nombramiento de magistrados de la Corte Suprema, que eran 12. Pongamos que el MNR tenía 35%, entonces tenía 35% de cargos, podía elegir a cuatro o cinco magistrados, eso se repetía en los jueces departamentales, en los fiscales y hasta para ser oficial de diligencia tenías que tener un carnet del MNR, del MIR o del ADN”.
“Ese era el grado de politización de la administración de justicia, entiendo que don Carlos (de) Mesa nos está planteando volver a ese sistema, volver a ese anacronismo; yo creo que es una posición equivocada”, afirmó en declaraciones al programa Esta casa no es hotel, de la red ATB.
Hace días, el exmandatario y actual candidato a la presidencia por la alianza Comunidad Ciudadana (CC) anunció en una propaganda que se difunde por algunos canales de televisión y por su cuenta de Twitter que de ganar las elecciones de octubre, “los jueces y los fiscales serán cambiados por gente nueva, contratada por su capacidad y sus méritos, no por sus padrinos políticos”.
Frente a ello, Arce Zaconeta señaló: “Lo que se tiene que hacer con la administración de la justicia es darle independencia”.
Si bien admitió que la primera elección de autoridades judiciales, en 2011, “salió mal”, dijo que en el segundo proceso, que se realizó en 2017, se logró un segundo grupo de administradores de justicia con perfiles como Petronilo Flores, en el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), y José Antonio Revilla, en el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), “quienes demuestran una actitud diferente”.
“Yo reivindico con mucha dignidad lo que hemos hecho con el notariado en Bolivia: meritocracia, capacidad y que nadie ingrese por otro mecanismo que no sea su capacidad, así se eligió a los magistrados actuales, así se eligieron notarios, ojalá nos acompañe la administración de justicia para elegir así a los jueces (y) la Fiscalía General para elegir a los fiscales”, indicó.
“Esa es la forma correcta de dar independencia. Un juez, un magistrado es independiente por su capacidad, una persona que está ahí por su capacidad hará respetar su capacidad, hará respetar su nombre y no se venderá ni se dejará manipular y ordenar por teléfono”, aseguró.