Medio: ANF
Fecha de la publicación: domingo 05 de mayo de 2019
Categoría: Procesos electorales
Subcategoría: Elecciones nacionales
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Antes de analizar el eje central del presente artículo es menester describir algunas situaciones similares de ambos candidatos para luego hallar las diferencias en sus acciones. Primero, Evo Morales y Félix Patzi son de origen indígena (aymaras); segundo, ambos vivieron en condiciones precarias y fueron víctimas de racismo y discriminación; tercero, actualmente ambos son autoridades estatales, uno a nivel nacional y el otro a nivel departamental. La situación de ambos candidatos hace que manejen el discurso de lo “indígena” desde el espacio en donde se desenvuelven como autoridades. En este entendido cabe preguntarse a partir del enfoque político: ¿qué han hecho ambas autoridades por los indígenas?, ¿han puesto en práctica lo que pregonan?.
Evo Morales desde que asumió la presidencia en el año 2006 hasta la actualidad ha posesionado como ministros a los “no indígenas” que anteriormente militaron en los partidos tradicionales (izquierda y derecha) y de manera complementaria y simbólica puso también a algunos “indígenas” en los ministerios. En este 2019, de los 20 ministros apenas cinco son de origen “indígena”: Cesar Cocarico Yana, Nélida Sifuentes, Vilma Alanoca Mamani, Milton Gómez Mamani y Diego Pary.
Ante esto uno se cuestiona: ¿En un “gobierno indígena” no deberían estar en los ministerios una mayoría indígena?, ¿Evo Morales no confía en los indígenas?, ¿Dónde están los profesionales aymaras o quechuas?, ¿Quién gobierna verdaderamente el Estado Plurinacional de Bolivia?.
Mientras Evo Morales confía en los “no indígenas”, al parecer Patzi actúa contrariamente. Desde que asumió la gobernación de La Paz en el año 2015 fue otorgando espacios de poder a los indígenas. En el primer año de gestión los únicos “no indígenas” fueron Silvia Murillo y Ronald Pereira, en las Secretarías Departamentales de Economía y Finanzas y Transformación Industrial, respectivamente, en la actualidad ambos renunciaron. El único que quedó en una dirección de jerarquía es Fabian II Yaksic Feraudy, él es el único “lunar blanco” que se siente orgulloso de su raíz de origen español (digo esto porque en el aniversario de la creación del departamento de La Paz de 23 de enero agradeció al embajador de España por haber heredado el idioma y la cultura española).
Hablando de otro asunto. Antes de que la estructura del Movimiento al Socialismo (MAS) definiera el binomio Evo Morales y Álvaro García para las elecciones nacionales de este año, los sectores y organizaciones indígenas afines al partido gobernante solicitaron que el acompañante de Morales, en lugar de García, sea una o un “indígena”, pero el “jefe del MAS” no aceptó las demandas de las bases y ratificó al actual vicepresidente de Bolivia como su acompañante. Por otro lado, Félix Patzi nuevamente actúa de manera contraria; después de una evaluación meritocrática decide que la candidata a la vicepresidencia por el Movimiento Tercer Sistema sea una “mujer indígena” de origen quechua, nos estamos refiriendo a la enfermera Lucila Mendieta.
Otro elemento diferenciador entre Morales y Patzi es la valoración o desvalorización que tienen hacia la juventud aymara o indígena. Evo Morales apuesta por la juventud, pero no por la “juventud indígena” sino por la “juventud jailona” o “juventud no indígena”. En un congreso llevado a cabo este año, en el Chapare, el propio Evo Morales ratificó y mencionó que los herederos para direccionar el “proceso de cambio” son los jóvenes, a mi parecer, no indígenas: Manuel Canelas, Adriana Salvatierra, Ademar Valda y Andrónico Rodríguez, este último joven indígena juega un rol simbólico y quizás después sea remplazado por Valeria Silva. Hace un par de años los jóvenes intelectuales aymaras Wilmer Machaca y Jesús Samaki Humerez ya se habían percatado sobre esta situación y lo manifestaron en dos artículos publicados en el periódico digital Pukara Nº 101 y 123. Ellos indicaron que los “jailones” nunca estuvieron al lado de los indígenas y que al contrario solo buscan aprovecharse de los indígenas. Pregunto a este “gobierno indígena”: ¿Dónde están los jóvenes indígenas o qué rol juegan en las arcas del Estado y en el MAS?
El gobernador de La Paz, Félix Patzi, también promociona y apuesta por los jóvenes, pero preferentemente por los “jóvenes indígenas”. Como dato, la ex autoridad Ricardo Mamani fue el primer Secretario General joven en la gobernación, además de ser aymara. Actualmente continúa en una instancia de poder dentro de la gobernación. Según los datos de la dirección de RRHH de la gobernación de La Paz, más del 50% de las Secretarías Departamentales y las direcciones están al mando de jóvenes indígenas, podemos mencionar a algunas autoridades: Rocío Paco, Esteban Pati, Beatriz Zegarrundo, Dennis Pari, entre otros. Por eso no es nada casual que Félix Patzi, en su propuesta electoral, ponga como prioridad a la juventud, señalando: “que los jóvenes tengan sus propias empresas”. Si uno se anima a dar una vuelta por las oficinas de la gobernación observará que más del 65 % de los funcionarios son “jóvenes indígenas”.
Después de todo Félix Patzi en los hechos no es igual a Evo Morales. Evidentemente ambos son “indígenas” que pregonan lo indígena, pero en la práctica tienen distintos enfoques y actos. Félix Patzi otorga poder al indígena y al joven, mientras que Evo Morales limita la participación del indígena en los espacios de poder, al parecer para él y su acompañante el “indígena” continúa siendo un símbolo y no un sujeto de acción. Los “jóvenes indígenas” para el “gobierno indígena” parece que solo están para pintar paredes y movilizar marchas y protestas en contra del imperialismo.