El apoyo a la rehabilitación del presidente Evo Morales para los comicios de 2019 volvió a tomar las calles de La Paz, ayer, en medio de críticas de la oposición por el abandono del aparato estatal para concurrir a la masiva marcha que paralizó la Sede de Gobierno.

Miles de partidarios del Mandatario se movilizaron para expresar su respaldo a la repostulación de Morales en las elecciones de 2019, pese a que la Constitución no lo permite.

Obreros, campesinos, productores de coca, indígenas, transportistas y vecinos, además de funcionarios estatales, llegaron en marcha desde distintos puntos hasta la plaza San Francisco para expresar en un mitin su respaldo a la reelección.

También estuvieron los ministros de la Presidencia, René Martínez; de Desarrollo Rural, Eugenio Rojas, y de Culturas, Wilma Alanoca.

"Presidente Evo, el pueblo está con usted, y mientras el pueblo esté apoyando su gestión, usted va a seguir siendo presidente de todos los bolivianos", sostuvo el dirigente vecinal Jesús Vera.

Según Vera, esta movilización es una "manifestación democrática" para decir que "Evo Morales tiene que cumplir la Agenda 2025".

Los sectores movilizados portaron algunas banderas bolivianas, pero predominaron aquellas con los colores del gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS), además de algunas pancartas con mensajes que daban por hecho que Morales postulará en 2019, ganará los comicios y gobernará el país hasta 2025.

El oficialismo ya promovió en 2016 un referéndum para someter a consulta popular una reforma constitucional que permita a Morales volver a postularse en 2019, pero esa propuesta fue rechazada mayoritariamente.

Actualmente, está en marcha un recurso en el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), que podría declarar la inaplicabilidad de algunos artículos de la Constitución y anular otros de la Ley Electoral, para permitir la rehabilitación de Morales como candidato.

El vicepresidente Álvaro García Linera se pronunció al respecto minutos antes de que inicien las movilizaciones para la concentración en San Francisco. Destacó que este es un gobierno de los movimientos sociales.

"Estas manifestaciones que están empezando a organizarse tienen que ver con nuestra naturaleza social. Somos una estructura política que gobierna desde el Parlamento y el Órgano Ejecutivo y desde las organizaciones sociales”, indicó.

DANZA DE CRÍTICAS Y RECURSOS

El senador opositor Arturo Murillo (UD) denunció en su cuenta de Twitter que el ministro Rojas, también encargado político del MAS en La Paz, pidió apoyo económico a otros ministerios y obligó a funcionarios a asistir a la marcha.

Otros legisladores opositores denunciaron que funcionarios dejaron sus fuentes de trabajo para reforzar la convocatoria.

“Qué estará pasando. De repente se vaciaron las oficinas públicas, no hay funcionarios, ¿será que la sol se va a esconder y la luna se va escapar?”, escribió el diputado Amílcar Barral en Facebook.

En Sucre, el dirigente masista Rufino Millares alargó ayer la lista de adhesiones al recurso del MAS ante el TCP. Lo mismo hizo la ex constituyente Ana María Oporto, con una serie de argumentos.

Del otro lado, la asambleísta opositora Norma Piérola planteó tres recursos para inviabilizar la rehabilitación del Presidente. Exigió que se cumplan los plazos y denunció que hay “un pacto secreto” entre los magistrados para sacar a flote las intenciones gubernamentales de repostulación.

También Fidel Condori, dirigente del Consejo de Ayllus y Markas de Qollasuyu (CONAMAQ), advirtió con movilizaciones de su sector para frenar la repostulación de Morales, porque “atenta a la Constitución y a las normas”.

“Un indio está haciendo ver al país ante el mundo entero como narcotraficante, cocainero, nos miran como a narcotraficantes, corruptos, saquean recursos, no hay agua pero todo es campaña, la historia les juzgará en su momento”, sentenció.