Rechazo creciente. "Si se consuma la candidatura se habría completado la violación del ordenamiento constitucional que no solamente es reprochable, sino inaceptable para una buena parte de la ciudadanía y a estas alturas la mayoría de los ciudadanos que no va aceptar la postulación de Evo Morales a un cuarto periodo consecutivo; se lo prohíben las leyes y la Constitución", declaró a Erbol.

Quiroga considera que hay un rechazo creciente de la población que exige respeto al ordenamiento constitucional, peor aún con la designación del exmagistrado Ruddy Flores que ha fallado para la repostulación de Evo Morales por razones de obediencia partidaria.

Cree que la repostulación es algo que la gente lo va a rechazar de manera movilizada en las calles y aseguró que le cuesta imaginar que Evo Morales sea candidato en esas circunstancias. Citó de referencia la última encuesta sobre intención de voto del 22% que muestra el nivel más bajo de preferencia, en una tendencia que irá bajando y no subiendo.

La Haya como tabla de salvación. El analista señaló que el Gobierno está muy confiado en que un fallo favorable de La Haya subirá la popularidad del presidente Evo Morales, pero hay muchas razones para pensar que eso no va a ocurrir, independientemente como sea el fallo, acotó.

Advirtió que persistir en la reelección en esas circunstancias, es empujar a Bolivia al borde de una crisis política y recordó que el país vivió muchas crisis parecidas en el pasado y que la gente se ha movilizado hasta sacarse de encima a los malos gobernantes.

Manifestó que lo que está haciendo el Gobierno irresponsablemente, es empujar a salir del juego democrático y ver otro tipo de resoluciones como la sublevación popular.

"Si Evo Morales insiste en ser candidato, creo que no están garantizadas las elecciones, pero es tal la gravedad de repostular a Evo Morales en contra la ley y la Constitución, que podría estar viviéndose situaciones muy parecidas a Venezuela en las que el Gobierno tiene que recurrir a otro tipo de dispositivos y de recursos políticos para perpetuarse en el poder al margen de la Constitución. Esperemos que eso no suceda. Estamos organizados y movilizados justamente para impedir que eso ocurra", declaró.

Dijo que el régimen actual ha pasado la frontera entre lo que es permitido en democracia y lo que no es permitido, como el hecho de desconocer por completo el voto de la gente en el referendo del 21 de febrero de 2016.