Medio: Ahora el Pueblo
Fecha de la publicación: miércoles 10 de abril de 2019
Categoría: Debate sobre las democracias
Subcategoría: Repostulación presidencial / 21F
Dirección Web: Visitar Sitio Web
Lead
Contenido
“Rechazamos enérgicamente esta nueva intromisión en asuntos políticos de un país soberano”, expresó García Linera durante una conferencia de prensa minutos antes de emprender un viaje a Alemania.
“Esta nueva intervención o intento de intervención en asuntos políticos de un país soberano es rechazada por el pueblo boliviano en su conjunto, que aprendió a lo largo de los años que lo contrario de lo que diga Estados Unidos siempre será lo correcto”, afirmó.
El lunes se conoció que el 3 de abril, el Comité de Asuntos Exteriores del Senado de Estados Unidos aprobó el proyecto denominado “Una resolución que apoya los principios y estándares democráticos en Bolivia y en toda América Latina”.
Esta iniciativa, que fue presentada el 31 de enero por los senadores del Partido Demócrata Bob Menéndez y Dick Durbin y del republicano Ted Cruz, pasó al pleno del Senado para su consideración.
En el escrito se expresa la preocupación de que se eludan los límites de mandato en Bolivia y se reivindica el referendo del 2016, en el que se rechazó la reforma del artículo 168 de la Constitución Política del Estado.
Desde el MAS-IPSP señalan que se cumplió el mandato de ese referendo y que el artículo 168 de la CPE no fue ajustado.
Además apuntan que el presidente Morales está habilitado por la Sentencia Constitucional 084/2017, que anula los límites a la repostulación, y porque además fue elegido como candidato en las elecciones primarias del 27 de enero de este año.
Al reiterar su rechazo de manera contundente y categórica a esta nueva intromisión, García Linera dijo que esta no es la primera vez que funcionarios estadounidenses buscan involucrarse en los asuntos internos de Bolivia.
Recordó que un hecho similar se registró en 2002, cuando el entonces embajador de Estados Unidos, Manuel Rocha, amenazó a los bolivianos para que no voten por Morales.
También lo ocurrido en 2008, cuando el también embajador Philip Goldberg intentó bloquear la aprobación de la nueva Constitución Política del Estado. “Tuvo actividades conspirativas (se reunió con el entonces prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas) y fue expulsado”, refirió.
“Como es costumbre del pueblo boliviano, amparado en su autonomía, su autodeterminación, los bolivianos en su conjunto se opusieron a esas actividades conspirativas del embajador norteamericano en Bolivia”, enfatizó.
Luego de reiterar que Bolivia es un país soberano, como cualquier otra nación del mundo, expresó “el aprecio y cariño al pueblo norteamericano”.
Afirmó que Estados Unidos, como potencia decadente, arrastra problemas de pobreza y mencionó que “hay 40 millones de norteamericanos en la pobreza y 23 millones de norteamericanos de extrema pobreza en situaciones de países de tercer mundo”.
Además observó de Estados Unidos su sistema electoral “oscuro y sospechoso, donde el candidato que tiene más votos no gana”.