“Ocho contratos, entre órdenes de servicio y contratos. El monto total de todos los contratos y órdenes de servicio alcanza a 12.461.000 bolivianos. Nosotros ya enviamos a la Contraloría la solicitud para que haga las auditorías”, señaló.

El pasado mes de marzo, el senador Óscar Ortiz, de Unidad Demócrata (UD), denunció que en el Registro Público de Comercio de México se indica que la empresa fue creada en 2017 con un capital de poco más de 5 mil dólares, para objetivos tan diversos como comprar y vender maquinaria o arrendar inmuebles. Pero, pese a ello, fue contratada por el Ministerio de Comunicación como “empresa especializada” para elaborar la estrategia comunicacional Mar para Bolivia, entre otros contratos.

Ante esto, el titular del despacho de Comunicación precisó que, para garantizar transparencia en la labor de fiscalización, la “Contraloría evaluará” el proceso de contratación de la empresa y los productos desarrollados.

“Para darnos la total tranquilidad sobre el proceso de contratación, los productos finalmente realizados y sobre la implementación de esos productos, vamos a ser un poco cautos y esperar los informes de Contraloría, para tener todos la certidumbre de que en esas tres fases se hicieron las cosas bien”, dijo.

EL MAS BENEFICIA A ACTIVISTAS

El senador de Unidad Demócrata (UD) y candidato presidencial, Óscar Ortiz, denunció que integrantes de la empresa mexicana Neurona trabajaron en la campaña para el presidente Evo Morales en las elecciones de 2014. “Personas que llegan como activistas extranjeros para apoyar la campaña del MAS”, aseveró.

Agregó que la empresa, en su página web, expone como uno de sus trabajos que “administraron y participaron de la campaña electoral 2014 a favor del presidente Morales”.

NEURONA SE PRESENTÓ COMO FIRMA ESPECIALIZADA

En agosto de 2018, en la gestión de la entonces ministra de Comunicación, Gisela López, la firma mexicana obtuvo un contrato por 8,8 millones de bolivianos para producir “piezas comunicacionales para su difusión por la Dirección General de Redes Sociales”.

De acuerdo con datos, la administración central encargó la producción de 50 artes gráficas, 15 spots y dos videoclips para la campaña por la reivindicación marítima. Los trabajos habrían tomado entre seis y ocho días.

Según publicaciones de la fecha (21 de agosto), la exministra López justificó la contratación de la mexicana al explicar que “siendo redes sociales nuevas formas y tecnologías de las comunicaciones, la experticia y tecnicidad de las mismas no es abundante en el país. El mundo de las comunicaciones se transforma permanentemente en el planeta. En esta coyuntura, vivimos un cambio de paradigma comunicacional donde Bolivia está ingresando”.

Sin embargo, datos del senador Óscar Ortiz señalan que la empresa tenía una serie de objetos, desde gestión de recursos humanos hasta temas financieros, pero no era especializada.

El 2 de marzo de 2018, la empresa se adjudicó un servicio de consultoría, bajo la modalidad de contratación directa por 117.100 bolivianos.

Asimismo, el 23 de marzo, se adjudicó dos contratos: administrativo para la producción de material audiovisual y artes gráficas bajo la modalidad de “contratación directa de servicios especializados en el extranjero” para la campaña Mar para Bolivia por 1.553.298 bolivianos.